La Asociación Rapa das Bestas de Sabucedo, en el Concello de A_Estrada, confirmó su intención de adaptarse a la nueva normativa de la Xunta de identificación de los caballos salvajes con microchip. El colectivo está completamente decidido a celebrar los tres curros de esta temporada, previstos para el primer fin de semana de julio. Sin embargo, para hacer frente a este marcaje de la cabaña de O Santo, el programa de este año contempla adelantar la bajada de las reses a la aldea. De este modo, en lugar de subir a los montes para reunir a las manadas en la mañana del sábado, como venía haciéndose hasta ahora, los vecinos agruparán y bajarán a los équidos el viernes. La previsión es reunirlos en uno de los cierres de Sabucedo, donde se instalará una manga para que los veterinarios puedan colocarles el microchip. Estas labores se aprovecharán ya para separar a los potros y desparasitar a los animales.
El presidente de Rapa das Bestas, Pepe Paz, calculó en 50 euros el coste de identificación de cada animal, un gasto para el que la asociación ya tiene solicitada la ayuda de la Xunta. En todo caso, Sabucedo ya comenzó en 2003, por iniciativa propia, a incorporar microchips a sus caballos para configurar un registro. La entidad tendrá que valorar ahora si esta medida es compatible con la que propone la administración autonómica. Paz reconoció que el coste es bastante elevado y señaló la posibilidad de que, con ello, algunos particulares terminen deshaciéndose de unos animales "sin valor en el mercado". No obstante, y tras indicar que nadie se puso en contacto con la asociación que preside, descartó rotundamente la posibilidad de que los curros de este año se cancelen en Sabucedo. "Nuestro curro es diferente". "Lo nuestro es una tradición; nuestro objetivo cada año es mantenerla", dijo.
