"Pretendo asentar la idea de que gozar de la belleza geométrica que hay en edificios, ciudades... es gratis. Lo que propongo es una mirada matemática para poder apreciar bellos ejemplos de formas naturales, arquitectónicas, urbanas o de diseño que hacen posible enamorarse de un lugar o de un objeto como tal".

Eso afirmaba ayer en el Club FARO el matemático Claudi Alsina, catedrático de esta disciplina en la Universidad Politécnica de Cataluña, que suele acabar sus conferencias con una frase: "La matemática rigurosa se enseña con la mente, la matemática hermosa se enseña con el corazón". Recientemente aparecido su libro "Geometría para turistas" en Ariel, ayer daba otro consejo en su charla sobre "Secretos geométricos de las maravillas mundiales", que le presentó el periodista de FARO Rafa López: "No salgas de casa sin las mates, ni siquiera si es de vacaciones",.

Y es que lo que ayer demostró Alsina apoyado en diapositivas es que, aplicando la mirada matemática al mundo, uno puede recorrer muchos secretos, misterios y curiosidades matemáticas que esconden las ciudades y edificios más emblemáticos del mundo. "Yo creo que es muy interesante que cuando todos hacemos turismo podamos descubrir la belleza geométrica y las curiosidades matemáticas que se esconden en los edificios de las ciudades, en la numeración de las calles, la localización geográfica… es un museo al aire libre, gratuito y que todos podemos recorrer para gozar de las matemáticas que están ahí presentes".

Hoy ya no podemos irnos de vacaciones sin pensar las matemáticas, dice Alsina. En todas las informaciones, desde que compramos los tickets aéreos hasta la previsión de las temperaturas, pasando por cosas como las tarjetas de crédito, los cambios de moneda o los ajustes horarios, por ejemplo, hay todo un mundo de números detrás.

Hizo en la charla un pequeño recorrido en base a apartados como la localización de las ciudades, el modo de crecimiento urbano en horizontal o vertical, las proporciones... empezando por Singapur, "una ciudad-estado que consigue hacer crecer físicamente su territorio; primero se eliminaron sus montañas y ahora compra islas enteras para ir ampliándolo". Otro tipo de crecimiento lo ejemplificó con Dubai: "Ha elegido crecer ocupando poco a poco la primera línea del mar, que es una geometría fractal".

Si organizáramos su charla por continentes, podríamos decir que de Europa destacó la gran cúpula que hizo Brunelleschi en la basílica de Santa María de las Flores, en Florencia, "que ha influido en el resto de cúpulas que se han hecho después. Como resultaba muy difícil hacer una cúpula tan grande, lo resolvió haciendo dos: la cúpula que vemos desde fuera es una, pero la que vemos desde dentro es otra. De esta forma, entre medias de las dos le quedó un espacio con el que ´jugar´ para poder sostener esta construcción de 115 metros de altura".

¿De América del Norte? Los grandes rascacielos, sobre todo por la época en que se hicieron los primeros, aunque consideró que también se merece un puesto de honor el gigantesco arco catenario de St. Louis (Missouri, EE.UU), el Gateway Arch, con un mirador en lo más alto, a casi 200 m del suelo y con pequeños vagones que suben por su interior, también se merece un puesto de honor.

¿De Sudamérica o Asia? Por ejemplo la numeración de las calles. En Argentina, según contó, es habitual ver que una dirección se encuentra en el número 3423, por ejemplo. Esto ocurre porque cada cuadra, como llaman ellos a las manzanas, tiene 100 números, de manera que se informa a través de la numeración de cuántas manzanas quedan para llegar al sitio. En Tokio, por ejemplo, ocurrió algo peor: la asignación de los números se realizaba por la antigüedad de los inmuebles, por lo que desplazarse por sus calles puede convertirse en un auténtico caos

Y hablando de Granada, no se olvidó de la Alhambra. "Y es que allí los nazaríes lograron descubrir todas las maneras geométricas posibles que hay para decorar con cerámica".