Situada la zona occidental frente al Mar de Japón, Shimane es una de las provincia menos pobladas del país con 750.000 habitantes y no es tan conocida por sus encantos turísticos como sus vecinas Kioto, Osaka o Nara, de las que la separan unas tres horas de tren,

Por eso, según dijo a Efe Syuichiro Matsuo, responsable de Turismo de Shimane, la leyenda de los dioses del matrimonio es un buen gancho para aumentar el número de turistas extranjeros en Shimane, que en 2008 fueron 32.150, lo que la convierte en la provincia con menos turismo internacional de Japón.

En Shimane es especialmente popular el templo de Izumo Taisha, dedicado a Okuninushi, dios sintoísta de la felicidad, las buenas relaciones y el matrimonio, como explican los responsables de turismo de la provincia.

Este templo, del que se desconoce la fecha exacta de construcción pero que se considera uno de los más antiguos e importantes del país, tiene sobre su puerta principal dos enormes cuerdas entrelazadas, símbolo del compromiso.

La leyenda cuenta que aquellos que deseen casarse deberán lanzar una moneda al aire hacia los enormes cordeles, de un grosor superior al de una viga, y si la moneda queda enganchada entre las dos cuerdas, sonarán campanas de boda. Eso sí, sin fecha definida.

"Mi hija visitó el templo el año pasado y se casa este", confesó a Efe entre risas el gobernador de Shimane, Zenbe Mizoguchi, que señaló que cada vez son más las tokiotas solteras que hacen excursiones de un día a los lugares sagrados, con ánimo de cambiar su estado civil.

En ocasiones, las solteras más resabiadas arrastran al templo a sus novios, que desconocen por completo los poderes del dios Okuninushi, pero que al llegar se dan cuenta del indirecto mensaje de sus parejas.

"No sé si son ciertos los poderes del templo, pero la presión es innegable", dijo a Efe un extranjero asentado en Japón con novia nipona, con la que visitó el templo sin saber de qué se trataba.

Según Matsuo, el gobierno regional está convencido del potencial turístico, sobre todo entre las mujeres, de esta desconocida provincia que cuenta con el difícil acceso y sus cielos casi siempre nublados como sus principales inconvenientes.

Syuichiro Matsuo explicó que la leyenda cuenta que en Shimane los dioses se alían para afianzar cualquier tipo de relación en un compromiso más sólido, sentimental o profesional, y que "si se supiera" sería un atractivo para una provincia donde el presupuesto de turismo para este año es de sólo veinte millones de yenes (200.330 dólares).

Los responsables de turismo de esta pequeña localidad, famosa por sus pescadores de almejas y la belleza de sus puestas de sol, insisten en que quieren promocionar así una ruta que incluye diez lugares sagrados, como los templos de Taegaki y Kamosu.

Matsuo aseguró que el mejor mes para las peticiones divinas de compromiso es octubre, cuando, según el gobierno de Shimane, los poderes de todos estos dioses se conjugan y se hacen más poderosos.

Sin embargo, debido a su limitado presupuesto para turismo, por el momento sólo disponen de una página web en inglés (http://www.kankou.pref.shimane.jp/e/index.html) y panfletos informativos en inglés, coreano, chino mandarín y cantonés.

A través de ellos, Shimane promociona sus atracciones como el castillo de Matsue, uno de los doce en Japón que mantiene su construcción original, y el Museo de Arte Adachi, cuyo jardín ha recibido tres estrellas de la Guía Michelin recientemente publicada sobre Japón.