Una vieja teoría del príncipe Carlos de Inglaterra sobre la importancia de hablar a las plantas será puesta a prueba por la Sociedad Real de Horticultura (RHS) de ese país. Una afirmación en ese sentido que hizo el primogénito de la reina Isabel II hace ya veinte años fue calificada en su día como una de sus “excentricidades”, pero los expertos de esa institución científica quieren determinar ahora si Carlos tenía o no razón, según han explicado.

El experimento se centrará en averiguar los posibles efectos de la voz humana sobre las tomateras, para lo cual se han elegido poemas de William Shakespeare y fragmentos de una novela post-apocalíptica del autor británico de ciencia ficción John Wyndham. Cada tomatera será expuesta a distintas grabaciones a través de los auriculares de una grabadora conectada al tiesto al nivel de las raíces. Los expertos harán mediciones de las plantas, que están en un invernadero de un huerto de esa sociedad en Wisley, condado de Surrey, antes y después del experimento y compararán los resultados con otras de control.

Experimentos anteriores con la planta del arroz demostraron que la música clásica activa los genes, pero la palabra hablada es algo distinto que hay que explorar.

Colin Crosbie, supervisor de los jardines y huertas de Wisley, a quien se le ocurrió la idea de poner a prueba las teorías del heredero del trono británico, está convencido de que las plantas responden a las voces humanas.

“Yo les hablo. La mayoría de los jardineros somos muy táctiles y nos gusta hablarles. A veces utilizamos un tono suave, pero otras las amenazamos”, declaró el horticultor al diario “The Times”.

La Sociedad Real de Horticultura va a publicar anuncios en ese periódico pidiendo voluntarios para que les lean a las plantas los pasajes elegidos. Aunque los expertos creen que las voces importan más que el contenido de la lectura, esa ciencia está en ciernes y no se sabe cuál será el resultado del experimento. Junto a Shakespeare, se ha escogido la obra de Wyndham “El día de los Trífidos”, una visión aterradora de monstruosas plantas carnívoras.