Las obras de Pamem Pereira, Bernardi Roig y Ouka-Lele son las encargadas de representar a España en esta torre de Babel del arte en la que se han convertido los distintos museos y salas que acogerán la bienal hasta el próximo 20 de febrero.

Artistas y organizadores han reconocido la calidad de las obras expuestas este año, aunque han criticado "el caos" organizativo y el exceso de obras en relación con espacio disponible.

Manuel Romero, comisario de exposiciones internacionales y que conoce la bienal desde sus orígenes ha asegurado a Efe que esta edición "supone el primer paso hacia una visión más cosmopolita e internacional de la bienal".

Romero, que insistió en que las obras de esta edición son "mejores que nunca", destacó que la organización ha estado en manos de gente joven, que si bien han pecado de "falta de experiencia", han logrado aportar "buenas ideas".

El embajador español en El Cairo, Antonio López Martínez, aseguró que la elección de España como invitada de honor responde a un reconocimiento del apoyo español a las bienales de arte en Egipto, tanto a la de Alejandría, como a la de El Cairo, en la que España es el único país "que nunca ha fallado".

Pamem Pereira ha desplegado una instalación colgante para expresar la idea de que "el otro", nuestro interlocutor, hace las veces de nuestro espejo, en quien nos reconocemos al reflejarnos, explicó a Efe.

Por su parte, el escultor Bernardi Roig, con varias obras donde la luz y el hombre comparten protagonismo, intenta transmitir la "conciencia de la terrible soledad y abandono del hombre del siglo XXI" que se encuentra "abandonado entre la luz", explica Manuel Romero.

La tercera representante española, la fotógrafa Oula-Lele ha llevado a la capital egipcia su obra "Inédita", donde a través de fotografías de su cuerpo desnudo y el de otras mujeres se hunde en el espacio de la intimidad.

La presencia del invitado de honor de esta bienal se completa con una serie de talleres en los que participan el Centro de Arte y Creación Industrial LABoral y Hangar, que están dirigidos a artistas y técnicos con el objetivo de crear un espacio para avanzar en "un camino hacia la sociedad del conocimiento a través de artistas y científicos", como asegura Rosina Gómez-Baeza Tinturé, directora del centro LABoral.

La inauguración, presidida por el ministro de Cultura, Faruk Hosni, ha tenido lugar en el Palacio de las Artes del teatro de la Opera de El Cairo, una de las sedes de este evento artístico fundado por el propio Hosni y que visita la capital egipcia todos los años pares desde hace 11 ediciones.