"Puedo imaginar un Egipto sin mutilación genital femenina para el año 2015", explicó hoy a Efe la secretaria general del Consejo Nacional para la Infancia y la Maternidad del país árabe (NCCM, por sus siglas en inglés), Mushira Jatab.

Jatab participa en la conferencia regional sobre ablación que se celebra hoy y mañana en El Cairo, a la que han acudido 18 países en los que esta tradición todavía pervive, entre ellos Sudán.

Nahid Gabralla, representante del programa sudanés para la abolición de la circuncisión femenina, comentó a Efe que el Ejecutivo de su país también ha desarrollado un plan para acabar con este problema en 2018.

Jatab y Gabralla, junto a decenas de responsables, debaten en Egipto los progresos alcanzados cinco años después de que se publicara la Declaración de El Cairo, en la que, entre otras cuestiones, se instó a los países en los que persiste la ablación a cambiar la ley para afrontar este drama.

Durante la inauguración de la cumbre, la primera dama egipcia, Suzanne Mubarak, quien ha impulsado la lucha contra la circuncisión femenina en su país, afirmó que "se ha trabajado muy duro en los últimos cinco años", y destacó que cada día menos jóvenes tienen que enfrentarse a una intervención de este tipo.

Aunque los participantes han subrayado constantemente la enorme labor que queda por delante, también han elogiado las mejoras alcanzadas en este periodo.

Jatab, del NCCM egipcio, por ejemplo, aseguró que "se ha conseguido reducir casi a la mitad su práctica" en el país.

Según los datos que maneja el Ejecutivo, las mujeres casadas menores de cincuenta años que fueron mutiladas alcanzan el 96 por ciento, mientras que actualmente su impacto entre las jóvenes de 10 a 18 años se sitúa alrededor del 50 por ciento.

En el caso de Sudán, Gabralla matizó que se ha pasado de un 90 por ciento en 1999 a un 69,4 por ciento en la actualidad. "Por supuesto que es un dato alto, pero para nosotros es muy positivo", puntualizó.

Sin embargo, existe una importante diferencia entre Egipto y Sudán. Mientras El Cairo aprobó en junio de este año un marco legislativo que penaliza por primera vez la ablación, en Sudán aún no se ha logrado.

Al respecto, los participantes en la conferencia hacen constante hincapié en que el desarrollo de las leyes es un paso fundamental en la lucha contra la circuncisión femenina.

A pesar de que la ablación afecta mayoritariamente a países de África, entre ellos especialmente a Egipto, Mali, Guinea, Yibuti y Sudán, también es común en algunas zonas de Yemen e Irak, y según UNICEF, hay informaciones que apuntan a una práctica reducida en Irán, Jordania, Omán, Gaza, India, Indonesia y Malasia.

En El Cairo también está estos días la vicepresidenta del Senado Italiano, Emma Bonino, fundadora de la organización "No Peace Without Justice", que colabora estrechamente con el Gobierno egipcio en la organización de la conferencia.

Bonino reconoció el papel de Egipto, uno de los países que está liderando "el gran cambio de los últimos cinco años", pero recordó que aunque "la ley es importante, no es suficiente", ya que el problema no desaparece de la noche a la mañana.

En este sentido, la senadora italiana ejemplificó que aunque en Burkina Faso la ablación está prohibida por ley, algunos aún cruzan al vecino Mali para poder practicarla.

Pero con todo, un tímido optimismo predomina en la reunión.

Mushida Jatab cree que "se ha superado la parte más dura, se han roto los tabúes sobre la circuncisión femenina".

Aunque considera que lo que resta ahora "es más fácil", es tajante al recordar que "todo se puede perder si no continuamos con el trabajo".