El motivo es el imán que llevan dentro los auriculares, ya que pude provocar alguna interferencia en el ritmo que indica el marcapasos al corazón, o incluso llegar a desconectar este tipo de dispositivos momentáneamente.

Los investigadores han hecho pruebas con 60 pacientes a los que colocaron los auriculares del ipod próximo a su marcapasos.

La interferencia sólo se produjo en el 14 por ciento de los casos (el 23 por ciento) y, según el estudio, no hubo ningún problema en los pacientes a los que se les colocaron los auriculares tres centímetros alejados del corazón.

El estudio concluye que los pacientes con marcapasos o desfibriladores implantados pueden disfrutar de sus iPods y otros reproductores de música como el MP3, igual que cualquier persona, pero recomiendan que sean cautelosos a la hora de guardar los auriculares y evitar, por ejemplo, meterlos en el bolsillo de la camisa.