Al conocer la noticia la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha pedido a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) que asegure que todos los productos que llegan a los consumidores españoles cumplen con todas las garantías. La OCU ha reclamado además que se adopten "las medidas necesarias" en caso de que el mercado español "pueda verse afectado". Diferentes asociaciones de consumidores se sumaron a estas reclamaciones y exigieron al Ministerio de Sanidad y Consumo que aclare si se encuentran en el mercado español partidas de derivados lácteos de alguna de las empresas que están siendo investigadas.y su retirada inmediata en caso de que así sea. El portavoz de la Federación de Usuarios Consumidores Independientes (FUCI), Luis Javier Alcalá, reclamó a las autoridades españolas transparencia absoluta para evitar que se repita la situación vivida hace unos meses en la crisis del aceite de girasol, cuando "durante tres días enteros" no se facilitó información al respecto.

Fuentes del Ministerio de Sanidad y Consumo señalaron que no tienen "constancia" de la entrada de este producto en el mercado nacional.