Qué asiento escoger a la hora de sacar un billete de avión es algo que preocupa a muchos pasajeros por temor a un posible accidente. Por ello, un estudio realizado por la Civil Aviation Authority y la Greenwich University, en Reino Unido, ha revelado, mediante el análisis de 105 accidentes de avión, que los asientos que presentan una mayor tasa de supervivencia en caso de aterrizajes peligrosos o incendios son los situados en el lado del pasillo del avión y los más cercanos a las salidas de emergencia.

Un asiento en el pasillo del avión y en una fila cercana a las salidas de emergencia. Esta es la localización que debe escoger un pasajero si quiere viajar en el asiento más seguro en el caso de que ocurra un accidente durante el aterrizaje o un incendio, según un estudio realizado por la Civil Aviation Authority y la Greenwich University británica en el que se han analizado 105 accidentes y se ha tenido en cuenta la experiencia de 2.000 supervivientes.

Gracias a esto se ha descubierto que la posibilidad de sobrevivir en un accidente de este tipo está estrechamente relacionada con la posición de los pasajeros. De hecho, los que tienen una mejor tasa de supervivencia son los que están en la misma fila de la salida de emergencia y las inmediatamente delante o detrás de esta. No obstante, los asientos situados entre la segunda y quinta fila a partir de la salida de emergencia también son de los primeros en escapar, aunque en este caso "la diferencia entre sobrevivir y perecer es muy pequeña".

De esta forma, los pasajeros que viajan en la parte delantera tienen un 65 por ciento de posibilidades de escapar de un incendio, mientras que el porcentaje se reduce al 53 por ciento para los asientos de la parte de atrás. Comparando la tasa de supervivencia de los asientos del pasillo con el resto del avión, queda de manifiesto que el primer caso es del 64 por ciento, frente al 58 por ciento del resto de viajeros, según una información de The Times, recogida por otr/press.

No obstante, las aerolíneas han notado desde hace tiempo una mayor demanda por estos asientos cercanos a la salida de emergencia, probablemente por el hecho de que poseen más espacio para las piernas. Por ello, en muchas ocasiones son asientos más caros que el resto del avión, algo que seguramente siga ocurriendo después de conocer que además de los más espaciosos son los más seguros.

Ignorar las instrucciones

Uno de los accidentes analizados en el estudio fue el del aeropuerto de Manchester en 1985, donde murieron 55 personas en un Boeing 737 después de provocarse un incendio. La mayoría de los pasajeros que murieron estaban sentados lejos de las salidas de emergencia, algo a lo que se sumó el hecho de que el propio fuego taponó algunas de las salidas del avión.

Por ello, algunos de los fallecidos en el accidente murieron por la intoxicación del humo, puesto que la mayoría de ellos estaban sentados a 15 filas de las salidas de emergencia y fueron los que más tardaron en intentar salir.

A pesar de que según la normativa de seguridad de un avión, este debe evacuarse en apenas 90 segundos desde que se inicia un fuego, esto normalmente no es posible debido a que muchas de las personas que han de salir del avión esperan a sus familiares o amigos para salir juntos y terminan provocando un caos que tapona las salidas. Además, normalmente el instinto de supervivencia hace que los pasajeros no escuchen las recomendaciones de la tripulación, de forma que tienden a escapar por la salida más cercana en lugar de la recomendada para cada parte del avión.