El personal sanitario de los hospitales y ambulatorios del Sergas sufrió el pasado año un total de 890 accidentes con objetos punzantes. La Xunta ultima una normativa para evitar, o al menos disminuir, los pinchazos accidentales del personal sanitario con las agujas, jeringuillas o lancetas usadas con los pacientes. La Consellería de Sanidade ya tiene listo el anteproyecto de la norma que obligará a todos los hospitales y ambulatorios de Galicia a disponer de sistemas de protección que impidan que médicos y enfermeras se expongan al contagio de enfermedades de transmisión sanguínea, como la hepatitis C o el sida. Fuentes del departamento de la Xunta confirmaron ayer a este periódico que, si todo va bien, ese material de bioseguridad se empezará a implantar en los centros sanitarios gallegos durante el primer semestre de 2009 y que, en el plazo de dos años, será de uso obligado en toda la comunidad.