Por tercer año consecutivo el centro español ha puesto a la venta cientos de libros nuevos y de segunda mano en castellano, gallego, catalán y euskera, y además ha proyectado películas durante todo el día y vendido comida española, todo esto amenizado con la música más de moda en España.

Rodríguez destacó que "familias enteras filipinas han convertido el sábado en un día de cultura española, no sólo comprando libros sino probando comida, escuchando música y viendo películas de España".

"De este modo, también damos a conocer nuestra propia gastronomía y nuestros propios productos", indicó.

Asimismo consideró que el éxito de esta iniciativa consiste en el debate que el Instituto Cervantes ha vuelto a generar sobre el aprendizaje del español en la ex colonia y en darse a conocer en los medios filipinos y mediante el boca a boca.