Schwartz es un hombre afable, encantador en sus formas, muy documentado en su fondo y defensor caracterizado de la bondad de liberalismo clásico. Pasó por Club FARO. Su último libro, "En busca de Montesquieu (Ed. Encuentro).

Hay generaciones que nacen en fechas anodinas. A usted le tocó Madrid en la preguerra civil y de niño contempló en Viena episodios de la II Guerra Mundial

Ambas guerras marcaron mi vida y me influyeron políticamente. Mi padre era diplomático y, es cierto, en Viena en 1942 comprobé los estragos del sistema nazi desde mi mirada infantil.

-No se crea que la gente de a pie tiene claro el significado del liberalismo...

El liberalismo clásico nada tiene que ver con el romántico; es de competencia, de libre mercado, de sociedad privada, de trabajo duro, de una responsabilidad personal que no quiere que sea el Estado el que saque las castañas del fuego.

-Si el capitalismo democrático es tan poderoso motor de propiedad e igualdad como sostienen los liberales ¿por qué son tantos los obstáculos con que se enfrenta?

-Esa es la pregunta que nos hacemos quienes defendemos un sistema de individualismo, libertad económica, democracia y apertura al mundo internacional.Una de las respuestas es si nuestra naturaleza humana, surgida de la sabana africana y tribal, es acorde con una sociedad abierta y competitiva. Otra el miedo a la libertad.

-Se quejan ustedes, los liberales, del intervencionismo del Estado pero hay quienes creen que son las multinacionales quienes mandan...

-Por eso soy muy partidario del librecomercio internacional. Cuando el mercado es grande incluso las grandes corporaciones son pequeñas. ¿Qué fue de la TWA o la Panam? Cuando hay libre competencia, los poderosos no son tanto.

-Para ustedes decir limitaciones al despido es mentar al diablo...

-La limitación al despido lo que hace es limitar el empleo de los jóvenes. Si es muy caro despedir, se piensa antes de contratar a nadie. Las malas condiciones de trabajo basura se deben al exceso desprotección de los que tienen 44 días de indemnización por año trabajado.

-No me diga que con lo que el empresario ahorrara en derechos de los trabajadores reforzaría el salario de otros...

-Las compañías lo que hacen es reinvertir su trabajo. En países en que los impuestos no son tan altos las personas con medios dan mucho dinero para caridad. Falta confianza en la generosidad de la gente con dinero.

-Oiga, ¿suenan las trompetas del Apocalipsis para la economía española?

-Del Apocalipsis, no. La economía sigue creciendo aunque poco. Puede ocurrir una crisis pero no profunda; de dos o tres años. Entre el 76 y 82 vivimos una verdadera crisis, con un aumento del paro hasta el 26 por ciento y de la inflación al 30. Yo creo que ésta va a ser corta pero para que eso ocurra y sea fructífera tenemos que cambiar parámetros, hacer que la economía sea más abierta y libre, con más iniciativa privada, más flexible la contratación... Este es un aviso para que Zapatero reforme.

"La globalización ha sacado a mucha gente de la pobreza"

Cuando se le dice a Schwartz que sistemas muy liberales como el americano no tienen Seguridad Social responde que lo que pasa es que no se conoce. "El problema que tenemos aquí es que la gente pide que el Estado le dé dinero por cualquier cosa. En cuanto a la Seguridad Social en América, es mucho mas generosa de lo que se cree. A los pobres los protegen, hay medicina gratis para los mayores, la enseñanza es gratuita..."

-¿Le suena a usted mal la palabra Seguridad Social?

-Tal y como la conocemos tiende a proteger a los que tienen y a no proteger a los que no pueden. Una gran parte de lo que no da la Seguridad Social lo podríamos pagar lo que pasa es que la gente quiere cosas gratis pero luego se va de vacaciones a una isla. Hay un abuso de ese sistema por parte de quienes podrían prever ellos mismos.

-¿Y la globalización? Hay quien piensa que camina hacia un caos incontrolado, hacia una especie de paraíso fiscal a escala planetaria...

-Es falso. Nadie rechaza unas leyes marco pero no un intervencionismo cotidiano. La globalización ha sacado tal cantidad de millones de personas de la pobreza que quienes la atacan lo que están diciendo es que hundamos a los pobres otra vez en la pobreza.

-¿No cree que crece una juventud llena de rabia y sin futuro, con trabajos miserabilizados?

-¿Usted lo tuvo fácil al empezar? ¿Cuándo compró su primer piso? ¿Se acuerda de la peli "La oficina siniestra"? Ellos no han visto las oficinas que sufríamos.