La vejez fue otro de los temas sobre los que la periodista vertió las experiencias de estos personajes. "Leguineche me dijo que hay que educarse para la soledad de la vejez. Yo creo realmente que no estamos preparados pero que lo que más inquieta a la gente es ir perdiendo facultades. Ester Tusquets me decía que de mayor sólo se hablaba de enfermedades y dinero y, sirviéndose de la ironía, que era un coñazo invitar a la gente a una fiesta a esa edad porque de tu agenda se te caían muchos nombres de amigos que habían muerto. Para el filósofo Lledó vivimos la juventud como si fuéramos inmortales. Según él podíamos comprar afeites pero no podemos comprar tiempo. Eso, ni las personas ricas".

La periodista pidió a estos veteranos, a lo largo de sus entrevistas, algún consejo que diera la experiencia. La mayoría se mostraron reticentes pero para la socióloga María Ángeles Durán "había que luchar por lo que se quiere pero luchar en compañía". Francisco González Ledesma opinaba que según quien los diera, sirven o no para algo. "Me dijo algo -comentó- que es con lo que al final me quedo. Que hay gente que con su sola existencia te está dando consejos continuamente. No precisan palabras, sólo con verlas actuar ya tienes un consejo".

También la memoria de tragedias vividas, lo que marca, estuvo en la charla de ayer. "La bióloga Castellví, la primera mujer que dirigió una base en la Antártida, me contó que su madre la había sacado de niña a la ventana envuelta en una manta para que viera el bombardeo de Barcelona, y nunca lo olvidó. Achúcarro, sin embargo, cree que el niño tiene un mecanismo que olvida lo malo. María Dolores Pradera dijo que tiene una memoria selectiva. Debe ser por eso que, cuando le pregunté la edad, me dijo que lo había olvidado por culpa de esa fatal memoria".