El presidente de Palau, pequeño Estado del Pacífico, se quedó en tierra después de que una aerolínea de Estados Unidos le prohibiera subir al avión por negarse a pasar los controles de seguridad en el aeropuerto de Manila, una vez concluida su visita oficial a Filipinas, confirmaron hoy fuentes diplomáticas.

Este incidente ocurrió la noche del pasado miércoles después de que el presidente Tommy Remengesau fuera despedido con honores por la anfitriona y jefa del Estado filipino, Gloria Macapagal Arroyo.

Remengesau y su comitiva, de la que también formaba parte la primera dama de Palau, tenían previsto regresar a su país en un vuelo de Continental Airlines, que como otras compañías aéreas que operan en Filipinas, aplica estrictas normas de seguridad cuando se trata de pasajeros corrientes.

Según fuentes del aeropuerto de Manila, el presidente de isla-Estado y su delegación, tuvieron que pernoctar en un hotel de la capital, donde aguardaron hasta que, hoy jueves, las autoridades de Filipinas pusieron a su disposición un avión para que los ilustres visitantes viajaran a Palau.

El embajador de Palau en Filipinas, Ramón Rechebei, señaló por medio de un comunicado, que habría sido "vergonzoso" para el jefe de Estado permitir que le inspeccionaran.

"Existe espacio para ejercer el sentido común, y debe haber un respeto hacia la dignidad de los más altos niveles de un gobierno", añadió el diplomático.