El Celta brilla en el mayor escaparte futbolístico del planeta. Los tres mundialistas que el equipo vigués presenta en Rusia han avanzado hasta los octavos de final con sus respectivas selecciones logrando un pleno histórico. Aspas defenderá la casaca de la Roja frente a Rusia en Moscú el próximo domingo; Maxi representará a Uruguay frente a Portugal el sábado y Pione Sisto apunta a titular, también el domingo, con Dinamarca frente a Croacia.

El protagonismo de los mundialistas célticos ha sido desigual. Iago Aspas es, de largo, el que más ha brillado hasta el momento. Y no ha necesitado mucho tiempo para lucir su descomunal talento. Una oportunidad cazada al vuelo ante Marruecos ha bastado al mago moañés para convertirse en el héroe del equipo de Fernando Hierro y regalar, con taconazo sublime, la primera plaza del grupo a la selección española. Su golazo a Marruecos con la derecha (su pierna menos hábil) en un movimiento de pillería indetectable para la defensa ha dado la vuelta al mundo por más empeño que más allá del Padornelo se ha puesto para restarle méritos. El peaje de pertenecer a un equipo modesto. Sin alzar la voz, a golpe de puro genio, Aspas se ha rebelado contra el papel secundario que Hierro parece haberle adjudicado y llama a gritos a la puerta de la titularidad,que se ha ganado sobradamente sobre el campo con más goles en menos minutos que ningún otro de sus compañeros. Rusia espera en octavos. La pelota está ahora en el tejado de Fernando Hierro.

No solo Iago Aspas se ha revalorizado en Rusia. En menor medida, sin semejante concentración de recursos y talento, también lo han hecho Pione Sisto y Maxi Gómez. El extremo escandinavo sido protagonista con Dinamarca. Age Haeride, el seleccionador danés, lo ha utilizado como titular en los tres partidos que el cuadro nórdico ha disputado en la fase previa, aunque su influencia en el juego ha sido muy inferior a la que ha tenido Aspas saliendo desde el banquillo.

La participación de Maxi, mientras, ha sido prácticamente testimonial, aunque el debut del artillero, que jugó unos pocos minutos en el último partido contra Rusia, le ha valido elogios de grandes estrellas de la selección charrúa, como Edilson Cavani.