Tras una temporada de informaciones confusas, por falta de estudios rigurosos, el cigarrillo electrónico se abre nuevamente camino como la alternativa menos perniciosa para los fumadores.

Organismos nacionales como el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) o la Universidad de Valencia han realizado estudios al respecto.

Las conclusiones del estudio para analizar los compuestos que se absorben al usar cigarrillos electrónicos realizados por los científicos del CSIC Esther Marco y Joan O. Grimalt revelan que los electrónicos suministran nicotina a los fumadores ( en los casos que tengan nicotina) pero no otros contaminantes que se transfieren con el tabaco, como el benceno, que es cancerígeno. Los otros dos compuestos del cigarrillo electrónico (propilenglicol y glicerina) permanecen en el sistema respiratorio del vapeador pero, aclaran, “estos son compuestos inocuos que ingerimos en muchos alimentos”.

Por otra parte, un informe del Departamento de Química Analítica de la Universitat de Valencia sobre cigarrillos electrónicos vendidos por una cadena de tiendas en España determina que en los líquidos que se usan para vapear en “no se aprecian riesgos toxicológicos, ni cancerígenos en los niveles en que se utilizan, con la salvedad del carácter adictivo del consumo de nicotina”. El análisis que se ha realizado en el Laboratorio de Higiene Laboral y Ambiental y que firma el catedrático de Química Analítica Miguel de la Guardia destaca el “carácter inocuo de glicerol y el propilenglicol”, que son los componentes mayoritarios de las muestras analizadas. El informe también recoge que la composición indicada en el etiquetado de los productos corresponde perfectamente a su contenido real y que en los formularios no se han detectado moléculas sin declarar.

En el Reino Unido, el servicio de salud británico (NHS) emitió un informe en agosto 2015 que revela que los cigarrillos electrónicos son un 95% menos dañinos que el tabaco tradicional. Tras esto, el citado departamento tomó la decisión de que los médicos del país pudieran recetar cigarrillos electrónicos desde el 1 de enero de este año.

En la actualidad, existen infinidad de modelos de cigarrillos electrónicos disponibles, para adaptarse a las necesidades y gustos de cada fumador, con una enorme cantidad de accesorios y repuestos. Hace apenas 2 o 3 años, los modelos disponibles eran escasos, con pocos accesorios y escasos recambios. Los precios han bajado debido a la gran popularidad de estos productos, de modo que el cliente puede disponer de dispositivos de última generación desde los 35 hasta los 100 euros.

Igualmente el abanico de sabores, hace que podamos encontrar el sabor que más se adapte a nuestros gustos. Las concentraciones de nicotina mas demandadas son las de 0% ( sin nicotina) las de 0,6% y 1,1%.