La parotiditis, comúnmente conocida como paperas, es una infección producida por el virus Paramixovirus. Un virus que como explica la doctora Isabel Cabrera, pediatra en el Hospital Universitario Niño Jesús, “tiene una ‘afinidad’ por las glándulas salivales, y dentro de estas la parótida es la más grande. 

La infección provoca que esta glándula, de la que proviene el nombre de la patología, se inflame y provoque esos bultos grandes en uno o ambos lados de la cara, que caracteriza esta enfermedad. 

“Además de la parótida en algunos casos también se pueden inflamar las glándulas submandibulares, situadas debajo de la lengua, provocan la hinchazón de la zona de la papada del niño”, añade la pediatra.

Síntomas y tratamiento de las paperas

Una vez que el virus infecta al niño, se produce un periodo de incubación de unos 15 días hasta que aparecen los síntomas. Además de la hinchazón de los laterales e inferior de la cara, la especialista en pediatría no explica otros síntomas que pueden aparecer: 

- El niño puede tener fiebre, aunque no suele ser muy alta y dura apenas 2 o 3 días. 

- Malestar general. 

- Dolor de cabeza. 

- Dolor en el oído al masticar. 

Las paperas pueden producir dolor de oído al masticar.

“La parotiditis no es una enfermedad grave, pero si es conveniente acudir al pediatra ante cualquiera de estos síntomas porque, como ocurre con otras enfermedades, las paperas son una enfermedad de declaración obligatoria, así que es el médico el que debe confirmar el diagnóstico”, explica la especialista. 

Para confirmar las paperas no es necesaria ninguna prueba concreta, solo la exploración del niño por parte del pediatra. 

Al igual que la varicela o el sarampión, las paperas no tienen un tratamiento específico. Para los síntomas como la fiebre y la inflamación, es conveniente administrar al niño ibuprofeno. 

En cuanto al contagio, es importante saber que la transmisión se produce a través de gotas, al hablar, al toser… Por ello es importante que el niño permanezca en casa unos 5 días desde el inicio de los síntomas. 

Posibles complicaciones

En general, la enfermedad trascurre sin complicaciones y remite en cuestión de unos 7 días. Pero la doctora Cabrera advierte de que “cuando las parótidas están inflamadas a causa de la infección son más susceptibles de captar bacterias y sobre infectarse”.  

Por eso debemos estar atentos a si: 

- La fiebre dura más de dos o tres días. 

- Si la zona inflamada se pone caliente o colorada. 

En estos casos se debe volver a la consulta del pediatra para que determine qué está ocurriendo e iniciar un tratamiento antibiótico si fuera necesario. 

Además de estas complicaciones, en el caso de los niños varones, se puede producir lo que los especialistas denominan orquiepididimitis. “Se trata de una inflamación de los testículos, que puede provocar la infección en los niños. Por eso, siempre es conveniente vigilar esa zona y si alguno de los testículos se inflama o está más caliente, se debe acudir al pediatra”, explica la doctora Cabrera. 

Esta inflamación testicular se suele resolver también un tratamiento antiinflamatorio. 

Otra de las complicaciones más típicas de las paperas son las encefalitis, “antes eran habitual ver a niños con ambas patologías, pero gracias a la vacunación esta asociación se ha convertido en algo muy poco frecuente”. 

La vacuna contra las paperas está incluida en el calendario de vacunación obligatorio, dentro de la llamada triple vírica (sarampión, rubeola y parotiditis), que se administra en dos dosis, la primera a los 12 meses y la segunda a los 3-4 años.