Seguro que en más de una ocasión has escuchado eso de que no es recomendable tomar hidratos por la noche. El pan, el arroz o la pasta antes de irnos a dormir no son la mejor opción porque, supuestamente, esas calorías no se gastan y se quedan en nuestro cuerpo en forma de grasa.
Todo eso son falsas creencias. La realidad es que nuestro cuerpo está constantemente gastando calorías para poder tener un buen funcionamiento, incluso cuando dormimos. Aunque estemos en la cama nuestros órganos siguen activos y, por lo tanto, consumiendo energía. Esto quiere decir que, los hidratos por la noche no suponen ningún problema en nuestro peso.
Es importante consumir esas calorías para que el funcionamiento de todos nuestros órganos, y por lo tanto nuestro cuerpo, sea correcto. No afecta el momento del día en el que se tomen, ya que el cuerpo las consume y reparte igualmente. En cambio, si tiene importancia la calidad de las comidas que hagamos, no importa que tomes pan o macarrones para cenar, siempre y cuando estos se acompañen de verduras o fruta de postre.
La clave estará en qué tipo de pan comemos (el pan blanco no es muy recomendable) y la forma en la que preparemos nuestra pasta. Evita salsas o fritos de acompañamiento y siempre que puedas, opta por su versión integral.