Desde hace meses las tapas de las alcantarillas de Pontevedra se transforman reconvertidas en mariquitas, tortillas, sartenes? El padre de las nuevas obras a nuestros pies es el artista Franck Sastre, que hasta hace escasas semanas residió en Pontevedra (el pasado verano protagonizó una exposición en el Mercado) y que ha llevado su trabajo a numerosas ciudades del mundo. Contesta desde Girona, donde prepara su nueva exposición.
- ¿Cómo inició las intervenciones artísticas sobre las alcantarillas?
-Empezaron como hace unos cinco o seis años, como un hartazgo mío de ver tanto tema en la prensa de la corrupción en la que estaban implicados muchos. De ahí me vino la idea de pintar un choricito con un huevo sobre una alcantarilla, surgió como una forma de protesta. Y lo que me sorprendió más es que al final se convirtió en una cosa bonita para los niños.
- ¿Cuántas obras ha realizado en Pontevedra?
-En Pontevedra tengo unas siete por todo el casco viejo, tengo a Mickey Mouse, ahora últimamente hice la de la mascarilla, tengo el happy, la mariquita, las bolas de Navidad, tengo bastantes ( risas). Sobre todo en el entorno del Mercado tengo hasta tres.
- ¿Dónde se le ocurrió el primero de estos trabajos?
-La primera que hice, la recuerdo, fue en Valencia. Me tocó hacer un mural allí con otros pintores y ahí hice la primera, lo recuerdo perfectamente. Y, claro, al vivir en Galicia empecé a inundar todo, vaya donde vaya las hago, en toda ciudad que paso. Por ejemplo Nueva York, Oporto, en Francia varias (Burdeos, Toulouse, Perpiñán?), Roma, en Estocolmo porque participé el pasado año en una exposición colectiva y así tuve oportunidad de hacerlo también allí, vaya donde vaya hago mis intervenciones artísticas sobre las alcantarillas.
- ¿Cómo son recibidas?
-¿Sabe lo que me pasa? Las hago a pleno día, las pinto rápidamente con mis cuatro o cinco espráis de colores, también lo hago en esta exposición, y son los niños los primeros en pararse, los primeros que hacen un corralillo entre ellos y, bueno, hacen fotos ( risas). Les hace mucha gracia, son conscientes de que no es un hecho de gamberros.
- ¿Cómo es su proceso de trabajo?
-Busco aprovechar la forma redonda para lograr una nueva imagen, otra visión. Siempre busco hacer algo rápido, sencillo, que pueda llevarse a cabo en 5 o 10 minutos, que sea una firma, por llamarlo de alguna manera, algo llamativo. Y lo curioso de todo esto es que hace como un año o año y medio desde una publicación japonesa me enviaron un texto, que traduje y resulta que decía que era una idea de que debían tomar nota los ayuntamientos para decorar un elemento del que nadie se había percatado, las alcantarillas. Decían que en vez de tenerlas de hierro estaba bien pintarlas, ponerlas bonitas, igual que se ha hecho con los contenedores en muchas ciudades, me hizo mucha gracia que les gustase.
- Y en el extremo contrario ¿lo han acusado alguna vez de vandalismo?
-No, en ningún momento me ha pasado, en ninguna ciudad, soy muy consciente de ello y el cuidado del elemento artístico es máximo; aprovecho por ejemplo siempre el elemento redondo, todas están hechas con una fuerte carga artística, no las multiplico y siempre lo que buscan es proponer una nueva visión.
