La semana ha comenzado con un ligero descenso de positivos nuevos de Covid-19, aunque es una tendencia que se ha mantenido en las últimas semanas, con altibajos que para nada conducen a bajar la guardia.

Según los datos facilitados por el Servizo Galego de Saúde, Sergas, ayer, en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés hay actualmente 667 casos de coronavirus activos. Desde el pasado domingo se han incrementado en 28 nuevos diagnósticos, una cifra ligeramente menor a la registrada en días anteriores, cuando el aumento pasaba del medio centenar.

Los concellos de la comarca que se mantienen en zonas con restricciones especiales son los que concentran la mayor parte de los casos. La Boa Vila, con 338 está a la cabeza. El mayor incremento en el municipio tuvo lugar el jueves y el viernes, que sumaron entre ambos 45 casos, mientras que tanto sábado como domingo, se registraron tres cada uno. En Poio, por su parte, hay 56. En Marín son 51.

El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, hace un llamamiento a la prudencia, un mensaje que comparte el regidor de Poio, Luciano Sobral, que reconoce que la situación es preocupante e insta a la ciudadanía a cumplir con las medidas preventivas "para salir de esta situación cuanto antes".

El área se mantiene en un nada deseable tercer puesto a nivel gallego en cuanto a números absolutos de casos activos, por encima incluso de otras como Vigo, Santiago y Ourense, en las que la tasa de contagios es menor en relación al total de población, superior a la de Pontevedra y O Salnés.

Además, se acerca a la de Lugo, otra de las de peor evolución de Galicia, que tiene 689 casos.

21 personas ingresadas

En cuanto a la presión hospitalaria, una de las cuestiones que más preocupa a los profesionales del complejo pontevedrés, ha bajado ligeramente, al pasar de 24 personas ingresadas a las 21 de las que informó ayer Sanidade.

La mayoría, 16, están en planta, mientras que cinco requieren de cuidados específicos de la UCI.

Una de las cuestiones que hacen incrementar notablemente el número de casos en el área sanitaria es que actualmente se están realizando PCR para detectar enfermos ante la mínima sospecha o de síntomas en los pacientes.

Desde que la pandemia se inició, en Pontevedra y O Salnés se han hecho 36.178 pruebas de este tipo, 413 de ellas entre el domingo y ayer lunes. La media se acerca a las 500 diarias en las últimas semanas.

Actualmente, se está procediendo a testar en los concellos con restricciones especiales a los trabajadores del sector de la hostelería, uno de los más expuestos al coronavirus por su estrecho contacto con la ciudadanía.

Además, desde el Complexo Hospitalario de Pontevedra se iniciará una campaña para que también se sometan a la PCR otros colectivos como la Policía Local, los taxistas y los trabajadores de ayuda a domicilio.

Desde que se declaró la pandemia, se han curado en el área de Pontevedra y O Salnés 1.179 pacientes, 19 de ellos, de hecho, recibieron el alta entre el domingo y ayer. Sin embargo, han sido 19 los fallecidos. Por el momento, la relación no es alarmante, ya que hay 62 altas por cada deceso.

En el conjunto de Galicia hay 4.304 casos de coronavirus y hasta el momento se han producido 718 fallecimientos.