La Covid no da tregua y, tal y como se esperaba, el inicio del curso escolar y el regreso a las aulas han traído consigo un goteo continuo de casos desde los primeros días. Poco a poco, uno tras otro, los centros públicos y privados se ven obligados a aplicar los protocolos por la pandemia facilitados por las consellerías de Sanidade y Educación.

Actualmente, en la comarca de Pontevedra, tal y como informa la Consellería de Política Social de la Xunta, hay varios positivos en escuelas infantiles. Ayer se conocieron nuevos casos en la Galiña Azul de A Parda, en Pontevedra; la escuela infantil Dalila, de Marín, y la escuela infantil de SEK Atlántico, en Poio.

Estos casos se unen a los que ya habían trascendido en días previos, el de un trabajador en la Escola Infantil da Casa do Mar de Marín y la Galiña Azul de Vilaboa, donde una pequeña dio positivo.

Según la información más reciente, en la Galiña Azul de A Parda hay 17 pequeños en cuarentena, puesto que estuvieron en contacto con el menor positivo. Por su parte, en las escuelas infantiles de Vilaboa y Marín son 11 y 8 los niños a los que aisló preventivamente.

En todos los casos, se ha procedido, además, a la desinfección de los espacios en los que se movieron los afectados, así como a una limpieza exhaustiva de los centros en general.

La realización de pruebas para descartar nuevos casos lleva buen ritmo. Tal y como informaron desde el Concello de Vilaboa, todas las PCR en la Galiña Azul de Vilaboa dieron negativas.

También han tenido ese resultado las que se hicieron a alumnos y profesores en el Colegio Magaláns de Dorrón. Estaban en aislamiento preventivo por el positivo de una pequeña y podrán volver a clase a finales de la próxima semana tras guardar la cuarentena que estipula el protocolo.

En cuanto al CEIP Barcelos, donde dos niños dieron positivo, fue desinfectado ayer a conciencia por una empresa.

Se mantienen en aislamiento preventivo a la espera de la manifestación de síntomas, el medio centenar de escolares que compartieron clase con los dos casos, en primero y sexto de primaria.

Por el contrario, continúan asistiendo al centro, por orden de la Xunta, los dos tutores de las dos clases afectadas, una decisión que ha provocado el nerviosismo de la comunidad educativa y de las familias de los niños matriculados en este colegio público.