Regresa el fantasma de los incendios a la comarca de Pontevedra. Los concellos de Cerdedo-Cotobade y de Cuntis vivieron ayer dos de los peores en lo que llevamos de verano por distintas razones. En cuanto al primero, en Augasantas, debido a la superficie calcinada de más de 65 hectáreas según las estimaciones de la Xunta cuando el fuego lograba ser estabilizado. El segundo, en el lugar de Sebil,en la parroquia de Cequeril en Cuntis, por que se produjo en una zona forestal pero próxima a las viviendas, por lo que fue necesario protegerlas de las llamas e incluso evacuar alguna de ellas.
El incendio de Augasantas se detectó un cuarto de hora antes de las dos de la madrugada. Un hecho que para el alcalde de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, es un claro síntoma de que el incendio fue provocado "como prácticamente todos en el municipio". Cubela explicó que no existe ninguna causa natural que pueda originar las llamas en plena madrugada, sin tormentas y con la temperatura y humedad de ayer noche en una zona tan elevada como en la que se inició el fuego.
La hora a la que comenzó el fuego provocó que este avanzase con mayor celeridad, dado que como destacó el alcalde, la falta de luz natural impidió la movilización de los medios aéreos hasta que amaneció. Entonces el fuego ya superaba las 20 hectáreas.
La Xunta desplegó numerosos medios, según explicaron fuentes de la Consellería de Medio Rural. En la extinción llegaron a estar trabajando un técnico, seis agentes, 14 brigadas, 14 motobombas, dos palas, seis aviones y tres helicópteros que a finales de la mañana lograron estabilizar el incendio. Pese a la rápida intervención de los medios, entre los que se encontraban efectivos de Protección Civil de la localidad, al final de la mañana la Xunta ya daba un primer balance del terreno calcinado por encima de las 65 hectáreas. De todas ellas, unas 20 eran de arbolado y el resto de monte raso.
El alcalde de Cerdedo-Cotobade agradeció la rapidez y la importancia del despliegue, sin el cual, asegura que la superficie quemada habría sido todavía mayor.
Por otra parte, en Cuntis fue donde se vivieron por la tarde escenas de nerviosismo por la cercanía de las llamas a varios núcleos de viviendas en la parroquia de Cequeril.
Según explicaba el alcalde Manuel Campos desde el propio lugar de los hechos, las llamas avanzaban empujadas por el fuerte viento hacia las casas, por lo que fue necesario establecer diferentes perímetros con el objetivo de protegerlas contra el fuego. Para ello, además de los medios antiincendios forestales de la Xunta, se movilizaron numerosos recursos tanto de Bomberos como de Protección Civil de Cuntis, Caldas, Portas, Vilagarcía y Moraña.
Uno de los puntos más afectados fue el lugar de A Cruz. Allí elfuego puso en serio riesgo varias casas. En una de ellas, el fuego llegó a entrar en el interior de la finca. Se trata de una vivienda en la que reside gran parte del año una señora mayor, de 87 años y sola. Afortunadamente, ayer su hija se encontraba en la casa pasando una temporada de vacaciones y pudo socorrer a su madre. Llamaron al 112 cuando vieron las llamas encima de su vivienda.La respuesta fue rápida y los medios de extinción lograron frenar el avance del fuego: "Pasamos muchos nervios y preocupación", explicaba esta mujer.
