La Concellería de Benestar Social ultima su primer convenio de colaboración con la Asociación Galega de Adopción e Acollemento (Manaia) para la financiación de un programa de actividades encaminadas a dar respuesta a las necesidades y problemáticas sociales de las familias adoptantes. Se busca asesorar a las familias acogoras y trabajar en la mejora del proceso de adopción y su problemática soical, así como la convivencia entre culturas.

El acuerdo con el colectivo que preside Tania Lago se debatirá hoy en la Xunta de Goberno pmunicipal ara su aprobación y se traducirá, indican los responsables municipales, en una subvención anual de 2.240 euros por parte del Concello de Pontevedra.

El teniente de alcalde, Tino Fernández, incidió en que "en Galicia existen actualmente más de 1.000 familias en trámites de poder ser adoptantes, un buen número de ellas en la comarca de Pontevedra, y se trata de una situación que sigue en continuo crecimiento".

"Esta demanda de adopciones", añade el concejal capitalino, "lleva aparejado un incremento de la problemática jurídica y social del proceso, lo que llevó al Concello a impulsar un acuerdo de colaboración que es tan necesario como noveoso".

En base a este convenio, la asociación Manaia, que, como indican los portavoces del Concello ha venido realizando su actividad de apoyo a las familias adoptantes desde el año 2006, desarrollará en Pontevedra un programa compuesto por "Talleres de Familias".

Sus responsables indican que serán 11 encuentros moderados por profesionales en la materia (se llevarán a cabo en sesiones de dos horas) y a ellos se suman se suman los "Encontros Familiares" durante dos sábados, con una duración mínima de cuatro horas y en los que se facilitará asesoramiento a las familias acogedoras a través de profesionales especializados.

Los objetivos de estas actividades pasan por, indican sus responsables, facilitar a las familias adoptantes todo tipo de información, apoyo y asesoramiento sobre el proceso de adopción; fomentar los contactos entre las familias y organizar encuentros; trabajar en la mejora del proceso de adopción; contribuir a difundir en la sociedad una imagen idónea de la adopción y de su problemática social, y promover la convivencia multicultural.