La Guardia Civil ha detenido a un vecino de Barro como presunto autor de un delito contra la salud pública, en la modalidad de cultivo y elaboración de drogas, al que se le intervinieron 12 plantas de marihuana, las cuales tenían una altura de más de dos metros, con un peso de 41 kilos. Su envergadura, y el hecho de que estuvieran tapadas con una tela para su ocultación, daba a la plantación un aspecto de tupido bosque.

Según ha informado el Instituto Armado, el hombre - de 48 años- ha sido puesto en libertad en sede policial con la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando sea requerido para ello. A raíz de las investigaciones realizadas por efectivos de la Compañía de Vilagarcía de Arousa, se tuvo conocimiento de una plantación de cannabis sátiva en una finca propiedad del detenido.

Las citadas plantas "presentaban un gran tamaño y se encontraban en una zona preparada para su cultivo, escondidas a la vista y tapadas con telas de ocultación", ha destacado la Benemérita. Había, además, distintos instrumentos y productos necesarios para su cultivo, tales como fertilizantes y abonos químicos.

Las diligencias instruidas, junto con las plantas intervenidas, han sido entregadas en el juzgado de Instrucción de guardia de Caldas de Reis.