La Xunta de Galicia asegura que lleva cuatro meses esperando por la licencia de la segunda fase de las obras del edificio de Benito Corbal, concretamente de las plantas 5ª, 6ª y 7ª que quedarán a disposición de la Universidad de Vigo y la planta 8ª que albergará la Fundación Manuel Moldes.

Según afirma el Ejecutivo autonómico, los trabajos de reforma ya están adjudicados y todo está listo para que pueda dar comienzo la reforma de estas plantas superiores, a expensas de la licencia que debe expedir el Concello. La Xunta recuerda que dicho permiso de obra fue solicitado el pasado 2 de marzo y la tasa correspondiente abonada. El ayuntamiento solicitó también el abono de la tasa de la licencia de apertura, que la Xunta pagó el 18 de mayo.

Los trabajos se centrarán en acondicionar las plantas 5ª, 6ª y 7ª y la 8ª, entre otras acciones, y también se finalizarán los techos, pavimentos y bloques de aseo, además de acometer las preinstalaciones de climatización, electricidad o telecomunicaciones.

Las obras tendrán un plazo de ejecución previsto de 6 meses, por lo que la previsión inicial era que el edificio estuviera plenamente operativo a finales de año.

Hace falta recordar que el resto del inmueble ya fue reformado y acondicionado en una primera fase que abarcó desde el sótano a la planta 4ª. Gracias a estos trabajos, ya están funcionando en el edificio administrativo y en el centro de la ciudad las oficinas de empleo y los locales destinados a las asociaciones, entidades sin ánimo de lucro, con fines de interés social, cultural, deportivo o sanitario. Además, también se habilitaron otros espacios de usos generales como un salón de actos, que ya acogió varios eventos.

El presupuesto total invertido en la reforma del edificio asciende a 5 millones de euros, que permitieron recuperar para el uso público los casi 6.000 metros cuadrados de este inmueble situado en el centro de la ciudad. Los trabajos de rehabilitación posibilitaron el acceso a un espacio que destaca por su eficiencia energética, entre otros.