En la plaza talismán en la que ha iniciado sus recientes triunfos electorales de Galicia y entre ovaciones y paseíllos, pero con un tono más tíbio que en las comparecencias de las últimas semanas. La cúpula del PP, con el ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy y el actual presidente del PP Pablo Casado a la cabeza, quiso encarnar ayer en el titular del Ejecutivo gallego y candidato a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, un mensaje de "serenidad en tiempos difíciles".

Fue la expresión que empleó Mariano Rajoy, uno de los que felicitó a Núñez Feijóo por "unir y no dividir", mientras que Casado apeló a la experiencia de 11 años de gobierno del gallego y a "huir de los bloques, de la confrontación".

Ambos, con perdón del candidato, fueron los grandes protagonistas de un mitin simbólico que, dadas las restricciones del escenario postcovid, solo pudieron contemplar 350 espectadores distanciados por los tendidos y la arena del coso. Vía streaming, siguieron las comparecencias unas 1.400 personas, según la organización.

El presidente del PP de Pontevedra y vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ejerció de anfitrión y fue el primero en referirse al especial simbolismo de la plaza de toros de Pontevedra, desde donde los populares han encadenado victorias, anticipando por ejemplo la de Mariano Rajoy. A ello se refirió también Casado, que confía en que un triunfo el próximo 12 de julio en Galicia traiga asimismo "buenos tiempos para España", en alusión a un gobierno de los populares.

Mariano Rajoy recibió la principal ovación. "Cuanto más se empeñen en decir que Pontevedra no te quiere, más demuestra que te quiere", manifestó Alfonso Rueda entre aplausos en una ciudad en la que continúa vigente la declaración del ex presidente como persona "non grata". Momentos después el aludido aseguraba sentirse "muy reconfortado con vuestras muestras de cariño... Estoy en casa", en la plaza donde en tres ocasiones los populares han inaugurado las elecciones al Parlamento Gallego. "Y en las tres ganó Feijóo".

No dudó en afirmar que durante los gobiernos de Núñez Feijóo Galicia se convirtió "en una de las comunidades más dinámicas de España", mejorando sus resultados económicos en tasas de paro y afiliaciones a la Seguridad Social, todo ello en un escenario político donde "se defendió el orden constitucional democráticamente".

Con la llegada de la pandemia, añadió, "se ha vuelto a dar una lección de serenidad y de hacer las cosas bien" en tiempos difíciles, un aplauso más a un político del que también elogió esa apuesta "por unir, y no por dividir".

Casado, por su parte, se refirió a la importancia de "huir de los bloques, dela confrontación", para plantear una alternativa de unidad, y aprovechó la presencia en Galicia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que protagonizaba un mítin en Ourense, para sumarse a la petición de Núñez Feijóo y exigirle alternativas de futuro para "Ence, Alcoa y las conserveras", señaló, con instalaciones en concesiones marítimo terrestres a punto de caducar.