Poco a poco todas las actividades se van adaptando a la nueva normalidad y el marisqueo se suma a ello tras un acuerdo entre las tres cofradías de la ría de Pontevedra. Todas ellas se reunieron el pasado lunes y coincidieron en retomar la actividad poco a poco a partir del próximo 2 de junio. Se marisqueará dos días por semana, haciendo un total de 8 días al mes durante junio. Además solo podrán recoger el 25% de la producción, ya que continúan con el cese de actividad.
En la ría se trabajará respetando la distancia de seguridad y las cofradías repartirán mascarillas y en algunos casos también pantallas. En el puesto control se seguirá manteniendo la distancia y solo estarán las personas que sean necesarias según la normativa, en este sentido los patrones recuerdan que es responsabilidad de cada persona respetar todas las medidas y piden que así sea.
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Las tres cofradías irán los mismos días y los horarios serán los habituales, al igual que las zonas de marisqueo para cada cofradía, además aseguran que estos días no perjudicará para la renovación del permex. Las cofradías harán durante estos días diferentes consultas para tener una estimación del número de mariscadoras que se reincorporarán, aunque pueden decidir no ir los ochos días. Señalan que los mariscadoras se dividen entre quienes tienen miedo de sobrepasar la cuantía permitida y no cobrar por el cese de actividad y quienes no han recibido aún ninguna ayuda.
"Tenemos ganas de empezar y tantear cómo va todo, por la lonja, por el sector y sobre todo por el mercado porque empiezan a querer producto. Buscan almeja de calidad b, que no es tanto lo que se pedía antes, pero ahora tenemos que adaptarnos e ir viendo la necesidad del mercado", señala Carmen Vázquez, patrona mayor de la cofradía de Lourizán. Vázquez reconoce que "había algún comprador desesperado porque se abriese el marisqueo, pero es muy poca la cantidad que se pide" y por eso se irá dos días en semana. Además muestra cierto miedo a perder el mercado si no abrían ya, algo que expresó ya en la reunión que mantuvieron las cofradías el pasado 12 de mayo cuando decidieron no abrir aún.
"Habrá gente que quizás no vaya por no arriesgarse a pasar el porcentaje, porque aunque te pases por una cantidad diminuta ya estás fastidiado", señala César Rodríguez, patrón mayor de la cofradía de San Telmo. El patrón recuerda que esa cantidad son unos cinco kilos por día y persona, que es la mitad de la cuota y cree que no deberían tener problemas para vender esos kilos.
Por su parte el patrón mayor de la cofradía de Raxó cree que los precios serán razonables porque "no abunda la almeja japónica, pero hay que comenzar y ver qué pasa y como avanzamos porque no podemos comenzar de golpe". En este sentido se muestra positivo y anima a los mariscadoras, recordando que las cofradías están a su disposición para orientarles a diario "y que nadie se pase de esa cifra".
Con todo ello, el sector espera recuperar el 100% de su actividad para el mes de julio, si la situación continúa mejorando como hasta ahora. Se muestran preocupados por la demanda y el sector turístico abogan por el apoyo de los mercados locales y porque se compre producto de cercanía o kilómetro cero para poder salir hacia adelante. "Si no hay demanda exterior tendremos que consumir nosotros nuestro producto", defiende Vázquez.
Marisqueo a flote
Por su parte el marisqueo a flote retomó la actividad hace apenas una semana. Aún son pocos los barcos que faenan a diario ya que algunos continúan con el cese de la actividad y otros se dedican al choco. Rodríguez señala que los precios han oscilado entre los 16 euros y los 12 euros, un precio que disminuyó en los últimos días con el incremento de barcos.
Por su parte, Tomé cree que , aunque "el precio no acompaña mucho, hay que tener en cuenta la situación en la que estamos y los precios han sido más bajos en circunstancias normales". El patrón también recuerda que hay poca cantidad de almeja y que por ello van pocos compradores a la lonja, por lo que la competencia es baja y el precio también, y esperan que esta situación mejora con la vuelta del marisqueo.
