El levantamiento de las restricciones en las playas con la entrada de Galicia en la fase 2 de la desescalada no podría contar con mejor tiempo. Las Rías Baixas viven desde la pasada semana una anticipo del verano, con temperaturas que en los próximos días superarán los 30 grados. Una meteorología perfecta para la ansiada visita a los arenales e incluso el primer chapuzón del verano. Sin embargo, las medidas de control y prevención planteadas para evitar el contagio de covid-19 generan dudas sobre cómo y cuándo se puede acudir a disfrutar del mar y la arena.

Los alcaldes gallegos rechazaron la aplicación de la Xunta para solicitar cita previa en las playas. Algunos han planteado la división de sus principales playas en sectores y el control del aforo. Así, Vigo y Sanxenxo han desarrollado sus propios métodos de parcelación de sus arenales de cara a la amplia llegada de visitantes. Sin embargo, estas fórmulas no se aplicarán hasta los primeros días de junio. ¿Qué ocurrirá hasta entonces? A partir de hoy el acceso es libre, pero habrá que mantener la distancia de seguridad interpersonal de dos metros y no reunirse en grupos de más de 15 personas.

PONTEVEDRA

El Concello abre las playas del Lérez, Pontesampaio y Placeres, donde se instalarán unos paneles informativos con las normas: distancia mínima de seguridad de 2 metros, tanto en tierra como en el agua, y un máximo de 15 personas por grupo.

Sanxenxo parcela Silgar en 780 cuadrículas

Sanxenxo parcela Silgar en 780 cuadrículas

SANXENXO

El modelo de parcelación de Silgar ha dado la vuelta a España. Sin embargo, la división de su más emblemático arenal en 780 cuadrículas, zonas de paso y esparcimiento, y aforo de 2.340 personas, no entrará en funcionamiento hasta el 8 de junio. Hasta entonces, el acceso a este y al resto de los arenales de la villa turística es libre. Eso sí, desde el gobierno local informan que habrá vigilancia para que los usuarios guarden la distancia social obligatoria, como el uso de drones. Estos también se emplearán para retransmitir en directo la ocupación de los arenales.

Para evitar las aglomeraciones, el Concello ha dado preferencia peatonal a tramos de Silgar y Rafael Picó (en Portonovo) durante todo el día. Viandantes y conductores podrán distinguir estas zonas gracias al pintado de la calzada, de rojo con círculos blancos. Los vehículos que necesiten circular por estas calles deberán hacerlo a velocidad mínima.

POIO Y MARÍN

Ninguno de los dos concellos impondrá por ahora restricciones. Ambos gobiernos locales insisten en la necesidad de mantener la distancia social y de ponerse mascarilla en caso de que esto no sea posible.

¿Qué se puede y qué no se puede hacer en las playas?

El acceso será, por ahora, libre. Los concellos no prevén una saturación de los arenales en la recta final de mayo y primeros días de junio, pero desplegarán vigilancia. Los gobiernos locales confían en el criterio de los usuarios para disfrutar de la costa sin arriesgarse el contagio del covid-19. Para ello insisten en que los usuarios tendrán que mantener la distancia social mínima de dos metros entre personas, salvo si son convivientes. Con personas de fuera de la unidad familiar es preciso el uso de mascarilla si no se puede guardar esta separación. Los grupos no podrán superar las 15 personas y sus objetos y pertenencias no podrán desbordar su perímetro de seguridad.

Se permiten los baños y la práctica de actividades deportivas y de ocio, siempre que se realicen individualmente, sin contacto físico y manteniendo la distancia. Las duchas, fuentes, baños y vestuarios permanecerán cerrados.