La alcaldesa de Marín, María Ramallo, y la concejal de Comercio y Turismo, Cristina Acuña, mantuvieron ayer una reunión con representantes de los vendedores ambulantes del mercadillo para trazar como será la reapertura total del mismo, debido a las necesidades de cumplir estrictamente con todas las medidas de higiene y prevención de contagios enmarcadas en el estado de alarma.

En este encuentro se acordó, y se reafirmó tras el anuncio de la entrada en la fase 2 de desescalada de nuestra comunidad autónoma, que el jueves de la semana próxima el mercadillo de Marín ya podrá retomar su actividad con todos los puestos, independientemente del producto que comercialicen.

Así, y con el objetivo de poder garantizar la distancia de seguridad entre los puestos de la feria ambulante, que rozan los cien, se decidió que los puestos ocuparán menos espacio del normal, reduciendo sus metros para así crear corredores seguros por los que puedan transitar los vecinos que vayan a comprar.

Uso de mascarillas

Asimismo, será de carácter obligatorio el uso de mascarillas por parte de los vendedores y también por los clientes, en base a las indicaciones sanitarias vigentes a nivel estatal y cada uno de los puestos contará con gel hidroalcohólico para la disposición de vendedores y consumidores. Además, los dueños de los puestos deberán llevar también guantes para mayor protección.

Por otro lado, se establecerá un control específico por parte de la Policía Local, tanto durante el proceso de montaje de los puestos para garantizar que se cumplen estrictamente todas las medidas acordadas durante la reunión de la mañana de ayer en el ayuntamiento, como durante el transcurso del día, para controlar que la afluencia de gente en el mercadillo sea en todo momento acorde a las medidas de seguridad que se prevén para la fase 2.

Tanto el Concello como los vendedores hacen un llamamiento a la "responsabilidad" de toda la ciudadanía, para que se cumplan estrictamente todas las cuestiones individuales de prevención y higiene, dado que los propios vendedores serán los primeros en asumir todas las medidas necesarias de cara a poder ofrecer con garantía esta actividad económica, parada durante dos meses y que ahora precisa de su reactivación segura y con garantías.