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Coro Sánchez Hernández: "Solo detectamos tres positivos tras realizar 800 test; por lo que debemos ser prudentes"

"Salvo urgencias, los pacientes no deberían ir al centro sin previa valoración telefónica o con cita programada"

Coro Sánchez. // Rafa Vázquez

La Gerencia del área sanitaria anunció esta semana que la reactivación asistencial de la cartera de servicios de Atención Primaria se realizará de forma paulatina en los 44 centros de salud situados en Pontevedra y O Salnés.

Para ello, la dirección asistencial ha diseñado un plan estratégico en el que se contemplan medidas como la limitación del acceso a los centros de salud, la potenciación de la teleconsulta y el seguimiento telefónico de la evolución de los pacientes, así como la citación ordenada de las personas enfermas con el objetivo de evitar aglomeraciones en las salas de espera.

La jefa de servicio del centro de Virxe Peregrina, Coro Sánchez, aborda de qué forma se implantarán estos protocolos de actuación en el ambulatorio pontevedrés y analiza el papel que jugarán los profesionales de Atención Primaria en la vuelta a la normalidad de la actividad asistencial en Pontevedra y O Salnés tras la pandemia del Covid-19.

-¿De qué forma se llevará a cabo la reactivación asistencial en los centros de salud de Pontevedra?

-Con suma prudencia y condicionada por la evolución epidemiológica; puesto que mientras no dispongamos de vacuna ni tratamiento específico precipitarnos podría suponer un retroceso. De acuerdo al Plan de Reactivación Asistencial en Atención Primaria, vamos a continuar potenciando la consulta telefónica, que decidirá qué citas deben ser presenciales, incrementando las visitas presenciales de forma progresiva, y asegurando un circuito diferenciado de asistencia a los pacientes con síntomas compatibles con Covid-19.

Para evitar aglomeraciones hemos organizado las agendas de los profesionales facultativos de modo que eviten confluencia de pacientes e intentaremos ser proactivos con la atención de crónicos y usuarios frágiles en domicilio.

Es el momento de impulsar el uso de nuevas tecnologías para establecer vías de comunicación más ágiles con los usuarios y de fomentar la autonomía de nuestros pacientes en el autocuidado de su salud. Así, emplearemos la consulta telefónica como cribado, mediante triaje telefónico.

-¿Cuáles diría que son las ventajas de la atención telefónica y del teleseguimiento?

-En la situación actual intentamos minimizar la posible exposición al máximo. Los estudios de seroprevalencia a nivel nacional y autonómicos muestran que el virus ha circulado poco en Galicia. En nuestro centro de salud solo detectamos tres casos positivos en cerca de 800 test realizados, con una prevalencia en todo el área muy baja, en torno al 0,66%.

-Ante esta situación, ¿en qué casos habría que acudir al centro de salud?

Salvo casos urgentes, los pacientes no deberían acudir a los centros sin una valoración previa telefónica o una cita programada. Esto nos permite optimizar el resto de recursos, ser más eficientes y garantizar la seguridad de todos. La ventaja de la Atención Primaria es que conocemos a nuestros pacientes y ellos nos conocen.

-¿Este tipo de asistencia se podría implantar de forma definitiva, una vez erradicada la pandemia del Covid-19?

-Estamos aprendiendo mucho en esta crisis sanitaria y es el momento de proponer lo que nos parece que es bueno y de desechar prácticas ineficientes. Necesitamos dar una respuesta proporcionada a cada problema de salud; en ocasiones basta con una orientación, en otras se requiere la realización de exploraciones y pruebas complementarias. El uso racional de los recursos es responsabilidad de todos: usuarios y profesionales. Creo que los objetivos de salud en Atención Primaria deben recuperar la perspectiva comunitaria.

-¿Cómo es el protocolo de atención domiciliaria por parte de los profesionales de Atención Primaria y cómo se efectuará a medida que continúe la desescalada?

-Los pacientes frágiles, como pueden ser aquellos con problemas de movilidad o discapacidades que limitan su autonomía, se han seguido atendiendo en domicilio durante la pandemia. Mantener las medidas de protección en este tipo de modalidad asistencial supone un continuo reto, pero la colaboración de los usuarios en este sentido ha sido plena.

Considero que es fundamental que existan nuevos recursos que nos ayuden a mantener y potenciar la visita domiciliaria con garantías de protección para todos en este nuevo escenario sanitario que se presenta.

-¿Qué medidas preventivas y de protección para profesionales y pacientes está previsto que se implanten a partir de ahora en el centro de salud Virxe Peregrina?

-En nuestro centro se ha establecido desde el inicio un cribado en la puerta principal que realiza personal sanitario, apoyado por personal administrativo, estableciendo así circuitos diferenciados de asistencia, separando a los pacientes con posibles síntomas de Covid-19.

Asimismo, facilitamos información esencial expuesta de diferentes formas. Por otra parte, los pacientes que acceden al centro de salud también disponen de mascarillas y dispensadores de gel hidroalcohólico distribuidos por todo el centro. Se han reorganizado las salas de espera para mantener la distancia de seguridad, señalizando aquellos asientos que deben permanecer vacíos y también se priorizan y agilizan los controles de pacientes con tratamiento anticoagulante o pacientes crónicos que se desestabilizan. I Día a día, también incorporamos sugerencias de pacientes y profesionales a nuestro método de trabajo. Es necesario que todos tengamos paciencia al respecto.

-Desde un primer momento, se destacó el papel estratégico de Atención Primaria a la hora de llevar a cabo la reactivación asistencial tras la pandemia, ¿en qué sentido han sido y serán fundamentales sus profesionales?

-La Atención Primaria ha jugado un papel estratégico colaborando con la información a los ciudadanos, realizando el seguimiento de centenares de pacientes sintomáticos en domicilio, diagnosticados o no, y evitando que se colapsaran los servicios de urgencia hospitalarios. Nuestro papel seguirá siendo estratégico en la detección de nuevos casos que permita aislar rápidamente los previsibles brotes que van ha surgir. Las bajas prevalencias detectadas en los estudios, aún con resultados preliminares, apuntan a que la inmunidad comunitaria es muy baja y la temporada estival puede incrementar el riesgo por la movilización de muchas personas a segundas residencias o que fijen como destino vacacional nuestra zona.

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