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Las perspectivas ante un segundo brote del Covid-19

Urgencias del CHOP propondrá la vacunación generaliza y "casi obligatoria" contra la gripe

"Ya estamos pensando qué pasará en octubre y noviembre, porque puede ser mucho más complejo que hasta ahora", asegura el jefe del servicio en Montecelo -"En 15 días veremos los efectos del desconfinamiento", dice

El jefe de Urgencias del CHOP, Javier García Vega, en un box del Hospital Montecelo. // Rafa Vázquez

Con ningún paciente ingresado en sus hospitales públicos y 146 casos activos evolucionando favorablemente en sus domicilios, el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés se prepara ya para futuras fases del Covid-19. Los próximos otoño e invierno están ahora en el punto de mira, por la probabilidad de que un repunte del virus coincida con la campaña estacional de la gripe. Aunque son enfermedades muy diferentes, la recomendación este año será la de la vacunación generalizada por la gripe, y no solo a los grupos de riesgo, como se venía haciendo hasta ahora, para que el nuevo virus no tome a la población con las defensas debilitadas, lo que podría complicar los casos, elevar el número de muertes y colapsar la sanidad pública.

"Ese va a ser el gran reto que tenemos en un futuro, porque en cuanto empiece la gripe, y todos los virus que le acompañan en la campaña, la situación puede complicarse muchísimo. Ya estamos empezando a pensar qué va a pasar en octubre y en noviembre, porque puede ser mucho más complejo de lo que ha sido hasta ahora", asegura el jefe del servicio de Urgencias del Complexo Hospitalario de Pontevedra, CHOP, Javier García Vega.

En este sentido manifiesta que "la vacuna de la gripe se recomienda cien por cien". "La campaña tiene que ser bestial y la gente tiene que concienciarse de que, poco menos, vacunarse tiene que ser obligatorio. Nosotros, desde luego, lo vamos a recomendar desde el minuto uno. Tiene que ser una vacunación masiva", dice rotundo.

El doctor reconoce que ya se puede afirmar que el área sanitaria ha pasado el "pico" del Covid-19 y que se encuentra en una "desescalada clara". "Estamos en la última fase de este brote, lo que no sabemos es cuándo se va a producir el siguiente", añade.

"Todavía estamos muy sobre aviso, no queremos lanzar las campanas al vuelo", indica sobre la ausencia de hospitalizados en Montecelo, donde hace un mes llegó a haber más de un centenar.

"Estamos ahora en un momento de menos incidencia, eso está claro, pero no podemos bajar la guardia. Tenemos que ver qué va a pasar en las dos próximas semanas", afirma con la prudencia que caracteriza a los profesionales sanitarios.

Lo que ocurra, considera, dependerá fundamentalmente "del comportamiento de la ciudadanía, de que se ponga las mascarillas, realice la higiene de manos...". "Dentro de 15 días veremos si realmente la bajada del confinamiento ha supuesto un incremento de positivos de coronavirus", aclara.

Todos los pacientes ingresados en el CHOP pasaron por el servicio de Urgencias del Hospital Montecelo, ya que la Atención Primaria se limitó a las consultas telefónicas.

El doctor García Vega agradece que la población, al ser conocedora de la situación por la que se pasaba en el hospital público, dejase de ir a Urgencias, lo que posibilitó que este servicio no colapsase. "El sitio más peligroso para estar era el hospital, por lo que las urgencias se redujeron a más del 50 por ciento de lo habitual", informa.

Reconoce que fueron semanas "agotadoras", en las que había que ver a los pacientes en un circuito específico con los EPI (equipos de protección individual) puestos durante horas. "No estuvimos desbordados en ningún momento por esa compensación en la bajad de urgencias hospitalarias. Esperamos que esto sirva para reflexionar del mal uso, tanto por parte de los usuarios como de Atención Primaria", manifiesta.

Por las manos de estos profesionales han pasado todo tipo de casos de coronavirus, desde los asintomáticos hasta los pacientes muy graves, sobre todo los mayores, "pero también hemos tenido gente joven, que no tenían comorbilidades y venían muy fastidiados, con unas neumonías bilaterales, insuficiencia respiratoria que propició su ingreso en UCI..."

Esta "variedad" se debe, precisamente, a lo desconocido del virus y las dificultades para prever su comportamiento en el cuerpo humano.

"Ahora tenemos ya herramientas para ver cómo está el paciente en líneas generales, como unas analíticas específicas, unos predictores. Hay tratamientos que mejoran la enfermedad, pero no tenemos el definitivo que hay que aplicar. Vanos aprendiendo día a día", resume.

El paso de Urgencias a planta hospitalaria ha sido, asegura el jefe del servicio, "ultra rápido". "A veces no hemos esperado ni una hora a que el paciente subiese a planta", celebra.

Agradecimientos

Para Javier García Vega la ciudadanía en general merece todo el agradecimiento de los profesionales sanitarios, "porque somos conscientes de que ha sido muy duro estar todo este tiempo en casa".

Pero, además, en su opinión, el comportamiento de sus compañeros ha sido ejemplar. "El esfuerzo del servicio de Urgencias ha sido titánico; esto nos ha reforzado como equipo", recalca.

"Todo el hospital ha colaborado. Ha habido profesionales de otras especialidades que han hecho guardias de los equipos médicos. Humanamente, el esfuerzo de los sanitarios ha sido bestial", subraya.

Las palabras más emotivas las dedica "a todas las familias que nos han sufrido" y "a aquellos que han perdido a algún sanitario".

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