El puerto de Marín es, sin duda, un motor económico muy importante para todo el entorno y, en consecuencia, un actor fundamental para el desarrollo económico y laboral de la villa y de gran parte de la comarca.
La alcaldesa, María Ramallo, y presidente de la Autoridad Portuaria, Jose Benito Suárez Costa, mantuvieron en la mañana de ayer una reunión para analizar el termómetro del recinto portuario y su situación en estos momentos, también muy complicados para el tejido económico del puerto.
Tal y como fue expuesto en la reunión, desde la declaración del estado de alarma la práctica mayoría de las empresas pertenecientes a diversos sectores siguieron trabajando, cumpliendo con las máximas condiciones de seguridad, incluso en aquellos casos en los que su implantación no fue sencilla por la naturaleza de las actividades a realizar.
En el que respeta a los sectores logísticos, de transporte marítimo, a las empresas del sector frigorífico y a toda la cadena de encausado pudieron continuar con su actividad, implantando aquellas medidas que se iban exigiendo para garantizar la salud en todo momento.
La flexibilización de horarios y la estructuración del trabajo en turnos obligó a bajar el ritmo en algunas empresas, como en el caso de los astilleros, o a realizar un parón de la actividad temporal, como en el caso de Gonvarri, que ya está de nuevo funcionando.
Pesca fresca
La actividad ligada a la pesca fresca fue la que más notó el impacto de la crisis sanitaria, sobre todo en el referido a las empresas transformadoras de los departamentos de exportación de pescado y marisco fresco.
Este mayor impacto tiene que ver con el cierre de la hostelería y de la restauración, que impide sacar este tipo de producto que no es tan consumido a nivel doméstico. Aun así se mantuvo la actividad de venta en la lonja como servicio esencial, adoptando medidas extraordinarias de seguridad y desinfección diarias.
La alcaldesa considera "muy importante poder contar con un polo logístico como el Puerto de Marín" durante la etapa de transición económica y de desescalada que vamos a vivir en los próximos meses. "El puerto es un generador de empleo y de riqueza, por lo que facilitará mucho las cosas a pesar de que los ciclos económicos a nivel nacional e internacional se vean afectados".
Según le trasladó el presidente de la Autoridad Portuaria a la regidora, el Puerto adoptó una serie de medidas económicas, como la flexibilización en la tramitación de tasas o la agilización de los pagos a proveedores además del trabajo desarrollado por la Autoridad Portuaria para aplicar sin demora todas las medidas de apoyo a empresas autorizadas por Puertos del Estado.
Posición competitiva
Además, gracias a estas medidas las empresas que residen en suelo portuario pueden situarse en una posición competitiva de cara a seguir desarrollando sus planes de futuro.
También la propia AP mantiene la planificación que tenía diseñada para continuar ejecutando las obras y mejoras en sus instalaciones, liderando la este motor económico "que no paró en todo este tiempo a pesar de todas las dificultades por las que estamos pasando y por las que pasaremos en el futuro más inmediato, lo que supone un enorme balón de oxígeno para la economía de nuestra comarca, derivada de la actividad portuaria", finaliza Ramallo.
La alcaldesa aprovechó para transmitirle a Jose Benito Suárez el agradecimiento del ayuntamiento de Marín tanto a la Autoridad Portuaria, como a las empresas del puerto y a todos los sus trabajadores "por el gran esfuerzo realizado para mantener las diferentes actividades que permitieron la continuidad de la cadena logística que abastece los mercados para los consumidores".
