Un equipo de 11 trabajadores pertenecientes al Servicio de Deportes y a las brigadas municipales del Concello trabajan desde ayer para permitir que el Pabellón Multiusos de A Xunqueira se pueda transformar en albergue de personas sin hogar. El personal municipal ya cubrió el suelo de la pista polideportiva y las tareas de montaje de la treintena de camastros con los que contarán las instalaciones, con el objetivo de que comience a funcionar como infraestructura asistencial a partir de las 12.00 horas de hoy.

Será el segundo albergue para personas sin hogar en la ciudad. La instalación se pone en marcha tras encargar Benestar Social a Rexurdir y a la Policía Local un informe sobre las personas sin hogar que permanecían en la calle a pesar del estado de alarma. Así, se detectó esta población de entre 15 y 20 personas que bien habían rechazado acudir al primer albergue en Raíña da Paz (Salcedo), o que habían llegado a la ciudad. También ocupará a algunas personas que dejaron Raiña da Paz y que ahora no pueden regresar a este primer albergue que está en cuarentena y no admite nuevas admisiones tras detectarse allí un positivo.

Si bien está previsto que comience atendiendo a una población de entre 15 o 20 personas, a tenor de los informes encargados a Rexurdir y a la Policía Local, va a tener una capacidad de hasta 30 plazas por si hubiera que atender a más personas.

Este nuevo albergue para personas "sin techo" estará gestionado por Cruz Roja a través de un contrato de seis mil euros que acaba de firmar Benestar Social y que estará coordinado por el Concello.

El régimen en el que se permanecerá en el albergue será de confinamiento, por lo que el contacto con el exterior será a través de los voluntarios de la Cruz Roja que les darán apoyo a los alojados. Estos, a su vez, deberán aceptar unas normas de convivencia y un protocolo de ingreso que consiste en tomas de temperatura diarias, control de saturación de oxígeno y ducha en el momento del ingreso, cuando también recibirán ropa limpia.

Cruz Roja aporta las camas, los sacos de dormir y las almohadas. También "kits" de higiene personal y se encargará de la lavandería. Los alojados estarán atendidos por un coordinador y dos voluntarios de la ONG.