El Concello de Poio informó este jueves que ha acordado con el de Pontevedra una serie de limitaciones a la circulación peatonal en el puente de A Barca, que comunica ambos municipios, para reducir los riesgos de contagio del Covid-19. Así, desde esta misma mañana los viandantes deben utilizar solo la acera en el mismo sentido de circulación que el tráfico rodado, de manera que para dirigirse a Pontevedra harán uso de la pasarela ubicada en el lado derecho, y viceversa.

La medida, impulsada por la Comisión de Emergencia del Covid-19 de Poio a raíz de una petición vecinal, está consensuada con el ayuntamiento pontevedrés y busca garantizar la seguridad de los peatones, evitando posibles contactos físicos y garantizando que se respetan las distancias de seguridad.

La Policía Local de Poio ya procedió a establecer estas restricciones del tránsito peatonal en el puente de A Barca y a instalar paneles informativos para los peatones. Caminando todos los peatones en una misma dirección, y ante el estrecho paso para peatones que tienen las aceras de este viaducto, es la única manera de garantizar que las personas que se ven en el deber de atravesar este punto de unión entre ambos municipios a pie, en aquellos casos contemplados por el decreto aprobado la raíz de la entrada en vigor de estado de alarma, puedan mantener las distancias de seguridad establecidas para evitar posibles contagios.

Con esta medida se ayuda a evitar contactos físicos que se pueden producir cuándo coinciden dos personas caminando en sentido inverso. El alcalde de Poio, Luciano Sobral, remitió un escrito a la Consellería de Infraestructuras informándole de los detalles de esta decisión, pensada para garantizar la seguridad y dar cumplimiento del establecido por el estado de alarma.