Las nuevas medidas de seguridad con motivo del coronavirus han generado las primeras quejas por parte de los usuarios de más edad del centro de salud "Virgen Peregrina", que piden que se les priorice en la cola ante la imposibilidad de poder sentarse en el exterior.

Para evitar el contagio por el Covid-19, el protocolo establece que todas las personas que tengan que acudir al ambulatorio esperen fuera. A la puerta salen las enfermeras y auxiliares a entregar partes de baja y alta, recoger documentación, medir el sintrom o permitir el acceso de aquellos que vayan por urgencias, curas o a Rx.

Aunque la afluencia es mucho más baja de lo normal, la espera puede rondar los diez minutos o el cuarto de hora en determinados momentos. "Yo no puedo estar tanto de pie, sin tener dónde apoyarme; deberían atendernos primero", se lamenta una mujer de avanzada edad que se ayuda de dos bastones para caminar.