El Comité de Seguimiento de la Diputación de Pontevedra frente al Covid19 se reunió este domingo bajo la presidencia de Carmela Silva y la vicepresidencia de César Mosquera para, una vez conocidos todos los detalles del Real Decreto de Alarma por la situación de emergencia sanitaria, tomar la decisión de suspender de manera provisional para este lunes la presencia de trabajadores en todas las dependencias provinciales. La medida ya fue trasladada a todo el personal mediante una orden de servicio además de la información del empleo de las tecnologías para realizar el trabajo remoto.

El objetivo es la reorganización a lo largo de este lunes de todos los servicios para procurar en las próximas dos semanas la mínima presencia del personal y facilitar, dentro de lo posible, el trabajo remoto a todas aquellas trabajadoras y trabajadores que no formen parte de los Servicios Esenciales según los protocolos aprobados por las autoridades. En este sentido, el personal crítico queda excluido de esta suspensión provisional, exclusión que implica al Centro Príncipe Felipe, que mantiene su actividad al cien por cien; las direcciones generales y habilitados nacionales; las Jefaturas de Servicio; la Estación Fitopatolóxica do Areeiro y la Finca Mouriscade; unidades de vigilancia, telefonía, Registro Xeral; brigadas de guardia, programa Revitaliza y CAU de la Diputación.

También, para mantener el servicio público, será obligada la presencia del personal imprescindible de Nuevas Tecnologías, Secretaría Xeral, Intervención, Recursos Humanos y Prevención de Riesgos Laborales. Toda persona que trabaje verá reforzadas las medidas de seguridad, distancia, limpieza y higiene que se extreman al máximo.

La presidenta Carmela Silva expresó su "agradecimiento al personal de la Diputación por su colaboración, trabajo y afecto", y apeló su comprensión y apoyo. "Sé que es un momento complicado y que son medidas contundentes, pero las tomamos con la máxima responsabilidad porque van a permitir que las trabajadoras y trabajadores puedan desarrollar su actividad con seguridad". "Las administraciones públicas, dijo Silva, estamos obligadas en esta situación de emergencia sanitaria a tomar decisiones que permitan salvaguardar la seguridad de la ciudadanía y de nuestro personal. Solo tenemos un objetivo, añadió, frenar el virus y lo estamos haciendo en la compaña de muchas funcionarias y funcionarios que están dejando lo mejor de si mismos para lograrlo".

La orden de servicio, comunicada este domingo a los trabajadores, también contempla la suspensión con carácter indefinido del trabajo presencial de mujeres embarazadas o lactantes, o empleados que convivan con ellas; personas declaradas de riesgo por las autoridades sanitarias o las que convivan con ellas, así como aquellas que convivan con personas mayores o con enfermedades crónicas.

Las nuevas medidas y las que se deriven de la reorganización de los servicios provinciales serán incluidas en una nueva resolución presidencial que se hará pública este lunes.