La subdirectora de Tratamiento de la prisión, Ana Terlera, explicó que actualmente A Lama cuenta con un total de seis módulos de convivencia y respeto. La principal diferencia con los módulos ordinarios es que se trata de espacios autogestionados y con una "participación activa" de los internos en las actividades y funcionamiento de todo el módulo, un compromiso de participación que los reclusos deben asumir voluntariamente. Se organizan en grupos de trabajo y comisiones que garantizan que todo funcione en el módulo como en un engranaje. Desde el economato, a la limpieza o a la recepción de nuevos internos.

El secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Luis Órtiz, señaló que, dado que el sistema penitenciario español cuenta con unas buenas infraestructuras, es precisamente en el campo del tratamiento penitenciario en el que hay que continuar avanzando.