La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra acoge a partir del próximo martes el juicio contra un facultativo que entre los años 2014 y 2015 prestó sus servicios como médico especialista del área de Rehabilitación del CHOP acusado de ser el autor de tres delitos de abusos sexuales contra otras tantas pacientes.

Los hechos se produjeron entre septiembre de 2014 y enero de 2015. El primer caso fue el de una mujer que acudió a la consulta del facultativo tras ser derivada desde el Servicio de Traumatología por presentar artrosis cervical y epicondilitis en el codo derecho. Tras examinarle por el codo y las cervicales (y haberle preguntado por su estado civil), el médico supuestament ele indicó que se acostase en la camilla, le subió el vestido y le apartó el tanga, introduciéndole dos dedos en el interior de su vagina sin utilizar guantes de exploración al tiempo que le palpaba la cadera. Luego repitió la operación palpando el otro lado. También en septiembre de ese año atendió en la consulta a otra mujer que acudía por cansancio en las piernas. Le pidió que se desnudase y le realizó tocamientos.

El tercer caso se produjo en enero de 2015 cuando acudió a la consulta derivada por el servicio de Traumatología una mujer con dolor en el pie y en los trapecios. El procesado le pidió que se quitara la camiseta y le tocó los pechos. Esto extrañó a la mujer, pero pensó que podía ser parte de la exploración de su dolencia. Volvió a la consulta en ferebro y le realizó un masaje en el pecho con aceite a pesar de que esto no estaba indicado para la dolencia de la mujer ni ser de su competencia. La Fiscalía considera que el acusado se aprovechó de su condición de médico para realizar estos actos por lo que le considera autor de tres delitos de abuso sexual con el agravante de abuso de superioridad. Le pide un total de 13 años de cárcel (8 por el primer caso y dos y medio por los otros dos) así como cinco de libertad vigilada e inhabilitación por seis años para ejercer como médico.