La Guardia Civil de Pontevedra ha detenido a una joven de 18 años, vecina de la capital, cuando pretendía cobrar la recompensa prometida por Lucía Lourido, la escritora a la que le robaron un ordenador portátil con todo su trabajo en la playa de Lourido, además de dos teléfonos móviles el pasado 3 de febrero. A la detenida se le imputan los delitos de hurto y extorsión.

La preocupación de la joven autora por recuperar su obra (tenía previsto publicar en breve un nuevo libro) hizo que, además de denunciar el hurto ante las autoridades competentes, recurriese a las redes sociales para pedir colaboración ciudadana y localizar así los archivos que almacenaba en el ordenador robado. Lo hizo ofrenciendo una recompensa de mil euros.

Esa publicación de Lucía Lourido en sus perfiles sociales llegó hasta la ahora detenida, que se puso en contacto con ella para ofrecerle la devolución de los archivos previo pago de la recompensa. La cita, que se llevaría a cabo en un establecimiento comercial de Poio, fue cubierta a través de un dispositivo especial de seguridad ciudadana del Puesto de la Guardia Civil de Pontevedra y la joven fue detenida infraganti cuando pretendía entregar a la denunciante un pendrive con los archivos de su obra literaria.

"La carpeta con el libro era lo más importante, pero tenía muchos más trabajos en el ordenador, además del valor material de lo que me robaron", explicó ayer Lucía Lourido, que pide colaboración ciudadana por si alguien vio algo sospechoso en la zona de Lourido el 3 de febrero sobre las 18.30 horas.

La detenida, con antecedentes policiales, fue puesta a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Pontevedra, que decretó su libertad provisional con cargos mientras que la investigación continúa abierta para recuperar la totalidad de los efectos sustraídos.

Sobre la detenida, la escritora destacó que "no mostró arrepentimiento y se quería aprovechar de la situación" desde el primer momento en el que contactó con ella a través de las redes sociales. Lourido no accedió al chantaje entre otras cosas porque cree que esta persona podría tratar de venderle algún otro de sus archivos en el futuro para sacar todavía más rentabilidad económica.

La escritora llevaba años trabajando en una guía para ayudar a padres con hijos con TDAH y solía escribir en la playa. Además Lucía trabaja en proyectos online y guardaba también en la memoria talleres, charlas, vídeos para su canal de Youtube un juego que diseñaba "para ayudar a la gente a encontrar su misión de vida" y demás material.