Agentes de la Guardia Civil interceptaron en Vilaboa un turismo cuando transportaba diverso material de gran tamaño en los asientos traseros, una carga sin asegurar que comprometía la seguridad del conductor.

Los hechos ocurrieron el pasado día 5, a la altura del km. 129.900, de la carretera N-550, en el municipio de Vilaboa, cuando una patrulla de Tráfico de la Guardia Civil interceptó un turismo que transportaba, "sin ninguna medida de seguridad, una importante cantidad de cuadros de gran tamaño y una maleta en los asientos traseros del vehículo", indican los portavoces del instituto armado.

Éstos explican que "los cuadros y el equipaje circulaban en la parte posterior del vehículo sin inmovilizar ni separador de carga con respecto a la parte delantera del turismo, lo que suponía un evidente riesgo de desplazamiento en caso de un frenazo, maniobra brusca o accidente, comprometiendo con ello, no solo la estabilidad del vehículo, sino también la integridad física del conductor, que en este caso circulaba solo".

El conductor de este vehículo se enfrenta a una sanción de 200 euros (100 con la reducción del 50%) como presunto autor de una infracción, sobre la disposición de la carga, que está tipificada como grave en el Reglamento General de la Circulación.

Tras esta interceptación el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra hace una llamada a la reflexión a aquellos conductores de vehículos no habilitados para el transporte de carga, sobre el riesgo que supone el transporte de objetos o material, ya que al no disponer de los accesorios que garanticen la adecuada protección o acondicionamiento puede crear situaciones de grave riesgo.