El pleno municipal aprobó ayer unos presupuestos "de premio", según los definió el concejal de Hacienda, Raimundo González Carballo. El documento, cuyas partidas suman 79,3 millones de euros contó con los votos de BNG, PSOE y Ciudadanos, cuyo apoyo le costó una suspensión cautelar de militancia al concejal Goyo Revenga.

El PP apuntó que son de "premio Corazón de Piedra", galardón recibido también por la ciudad por estar a la cola de España en gasto social. El portavoz popular Rafael Domínguez calificó al gobierno local de "vago" por llevar 20 años sin arreglar cuestiones como el estacionamiento en la ciudad, el gasto social, el saneamiento en el rural, o no pagar las subvenciones a los clubes deportivos, entre otras carencias.

El gobierno local defendió sus cuentas como unos presupuestos "altamente inversores, con un gran contenido social y medioambiental, que tratan de mejorar los servicios a los ciudadanos" , además de ser el presupuesto "más alto de la historia de Pontevedra", que avanza en el "equilibrio territorial" del municipio y acerca sus servicios públicos a "la excelencia", como los presentó el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores.

Estas cuentas perfilan el mandato municipal como "el de las personas", añadió el teniente de alcalde, el socialista Agustín Fernández, quien agradeció el trabajo del concejal "naranja" Goyo Revenga, para añadir sus iniciativas al documento, al tiempo que lamentó la "astracanada" del PP al rechazar las cuentas entre otras cosas por "machistas", cuando esta formación apoya gobiernos "fascistas" con Vox, en los que se niega la violencia machista y se eliminan políticas destinadas a combatirla. Una "falta de vergüenza" -denunció el portavoz socialista- "que no hace gracia porque es muy grave".

El PP votó en contra tras presentar una enmienda a la totalidad que fue rechazada. Rafael Domínguez habló en su intervención de "ineficacia e incapacidad" del gobierno local al afrontar las cuestiones que preocupan a los ciudadanos, como el desempleo, de un presupuesto "ilusorio, continuista e ineficaz", que llega con retraso al pleno, como consecuencia de las "luchas de poder" de los dos partidos del gobierno, y de olvidar a las parroquias del rural, que se vuelven a ver discriminadas en estas cuentas.

El portavoz del PP acusó al bipartito de "mentir" al hablar de una inversión de 65 millones de euros que no existe sobre el papel, de elaborar los presupuestos "menos participativos de la historia" de la ciudad, de subir el IBI a los vecinos del rural cuando carece de los servicios más básicos y de dejar de lado cuestiones como la limpieza, el transporte a demanda, o soluciones al estacionamiento en una ciudad donde cada vez es más difícil aparcar.

Rafael Domínguez también acusó al gobierno local de deber dinero a los clubes deportivos y lamentó incluso que el BNG cediese la gestión de los grandes eventos deportivos al PSOE porque "la única cosa que hace bien el Bloque son fiestas y deportes". Esta cesión sería -según Domínguez- el motivo por el que la negociación entre ambos partidos y la aprobación de las cuentas se retrasase tanto. "Sé que hubo discusiones y gritos en esas reuniones de negociación" afirmó el popular, lo que arrancó las risas de la bancada del grupo de gobierno.

Domínguez subrayó que Pontevedra sufre la tasa de paro "más alta de Galicia", cuestión que no afronta el documento del presupuesto municipal en ningún momento.

Por su parte, el concejal de Ciudadanos, Goyo Revenga, votó a favor tras lograr introducir 4 enmiendas al documento. Se refieren a la mejora de los parques infantiles y de las instalaciones de Unidad de Conductas Adictivas, instalar desfibriladores en áreas públicas y equipamientos deportivos y mejorar la limpieza de los colegios de Infantil y Primaria.