Los registros llevados a cabo el pasado miércoles en un pozo en la parroquia de Marcón en el marco del caso de la desaparición de Sonia Iglesias han quedado "totalmente cerrados".
"No es la primera vez que se producen nuevas investigaciones porque es un caso que no está cerrado. Cualquier dato, como ya ayer (por el miércoles) declaramos, es susceptible de ser abordado e investigado", recordó.
"Ese pozo, del que se tenía conocimiento pero no había sido localizado, ha sido hallado ahora por las obras que se están realizando en la zona y tras el desbroce de la finca, que lo puso al descubierto. Por ello, inmediatamente, la Unidad de Análisis de Subsuelo se desplazó a Pontevedra y procedió al análisis de ese pozo, una antigua mina de agua, con un resultado totalmente negativo", resumió aportando la misma información que el día anterior.
Déborah Fernández
Asimismo, confirmó que el caso de Déborah Fernández, desaparecida en Samil en 2002 cuando regresaba de hacer footing, nunca se había cerrado.
"Se han tomado una serie de declaraciones por parte de la juez que lleva el caso. De momento se continúa investigando", dijo, por su parte, el comisario de la Policía Nacional de Vigo y Redondela, Luis Gallego.
"Yo he recibido a la familia de Déborah aquí en la Subdelegación del gobierno. Al igual que el caso de Sonia Iglesias, no está cerrado y cualquier dato que pueda aparecer es susceptible de ser investigado. Es la jueza la que dirige el procedimiento de investigación", concluyó Maica Larriba.
El programa VioGen cuenta en estos momentos con 1.095 casos activos de violencia de género en la provincia de Pontevedra.
La Junta Provincial de Seguridad analizó estos datos ayer con la responsable de la unidad, que se coordina tanto con la Guardia Civil como con la Policía Nacional.
De este millar de casos, hay actualmente tres mujeres que se encuentran en riesgo extremo y otras siete con riesgo alto. El resto, se reparten entre riesgo medio, 118, y bajo, 437. Asimismo, otras 530 están enmarcadas en casos con riesgo no apreciado. Esta categoría, al igual que las restantes, puede cambiar en cualquier momento, ya que se trata de casos en los que los condenados se encuentran en prisión. En cuando abandonan la cárcel, se estima la gravedad del riesgo para la víctima.
El sistema VioGen coordina a las policías locales y los servicios sociales y de igualdad de los ayuntamientos en la lucha contra esta lacra con el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Fue creado en 2007 por la secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior.
