Un nuevo atropello a un ciclista el pasado sábado en la PO-308 en Albar-Liñares ha vuelto a abrir el debate sobre la seguridad para los ciclistas en ese vial.

Quien insiste en mostrar su preocupación es el colectivo Pedaladas, que recuerda que llevan año solicitando a la Xunta de Galicia para que “adapte esa vía a lo que realmente es, una vía urbana en casi toda su totalidad entre Pontevedra y Sanxenxo”.

El colectivo explica que el ciclista hacía uso de todos los elementos de protección obligatorio e incluso voluntarios lo que demuestra “el peligro de mantener infraestructuras no adaptadas a la circulación de bicicletas en el ámbito urbano”.

El ciclista resultó con heridas de gravedad. En este sentido, recuerdan que la DGT recomienda limitar a 30 kilómetros por hora la velocidad máxima en aquellas vías urbanas con un carril por sentido por lo que “nada les impide actuar ya”.

Piden decisiones urgentes:“No queremos otro muerto”, dicen.