Corsarios, piratas, pestes, naufragios... Las Rías Baixas fueron epicentro de las bases gallegas de corsos durante las guerras de la Corona Española contra Inglaterra. En la ría de Pontevedra hubo familias que jugaron un importante papel, como los Gago de Mendoza, que obtuvieron patente de corso del rey para interrumpir el comercio de las potencias enemigas. El historiador José María Leal Bóveda ahonda en este tema en el curso "La muerte viene del mar", que se celebra en la UNED hasta finales de marzo.
- ¿Qué es exactamente un corsario?
-El corso no es un pirata, es un arma que utilizaban las monarquías, la española y la inglesa mucho, para interrumpir el comercio de las potencias enemigas y asfixiarlas comercialmente. De ahí viene la patente de corso, una autorización del rey para que aquella persona que quisiera armar en corso, un barco, pudiera hacerlo con una licencia real. Se utiliza el término como sinónimo de pirata por un error que el cine no ha ayudado a subsanar.
- Es decir, que el pirata era "el malo", por simplificar...
- El pirata era una persona individual que se sitúa fuera de la ley, mientras que el corso sigue una estricta regulación. Además, hay una comprobación de los comandantes de los puertos a donde se llevan esas presas y que comprueban que ese corso está hecho conforme a las ordenanzas que el rey dispuso. Si no se hizo así, el corso es multado y si lo es dos veces, es inhabilitado.
- ¿Qué beneficios suponía ser corsario?
- Hacer corso significaba que a posteriori podías conseguir cargos de nobleza en la Armada Real. Por supuesto, también prebendas de señoríos, feudos y otras cuestiones económicas. Todo esto significa que un pirata atacaba todo cuanto barco pillaba, mientras que el corso solo a los de los países con los que España estaba en guerra.
- Por ejemplo...
- Por ejemplo, en el siglo XVIII España entra en guerra con Inglaterra diez veces. Durante todos esos años el corso funcionó mucho.
- ¿Fueron importantes las Rías Baixas para el funcionamiento del corso?
- Vigo fue el epicentro en los siglos XVII y XVIII porque Inglaterra y Portugal fueron aliados comerciales desde siempre. Al ser vecinos nuestros, los armadores en corso aprovechaban y recorrían las costas de Portugal para en cuanto veían un barco que salía hacia Inglaterra apresarlo. Lo llevaban a Vigo donde se subastaba. Los que accedían a esa subasta, que curiosamente eran de Portugal, hacían su agosto.
- ¿Y en Pontevedra? Ya por esa época había perdido el calado en su ría...
- Pontevedra del siglo XIV al XV, a través de la Cofradía de Mareantes del Corpo Santo, controla todos los aspectos organizativos y administrativos de todas las rías entre Vigo y Muros-Noia. Pero a finales del XVI, cuando la sardina empieza a entrar en decadencia y por la pérdida de calado empieza a ser un puerto enterrado.
- ¿Aportó corsarios la ría de Pontevedra?
- Evidentemente. La familia de los Gago de Mendoza son los armadores y capitanes de corso más famosos. Pero esto no quiere decir que en las otras rías, como Arousa, no hubiera. La propia burguesía bancaria de Santiago armaban corso en Carril; son famosos los Santa María. Armar corso significaba aportar el barco, la tripulación, el armamento y los capitanes, que eran quienes dirigían las operaciones de búsqueda y captura.
- Es decir, que era una actividad muy costosa...
- La monarquía facilitaba y daba patente pero no ponía dinero. Armaba fundamentalmente gente que tenía dinero y como el corso daba tantísimos ingresos era una forma de seguir aumentándolos. Los Gago de Mendoza en Pontevedra son el arquetipo de armadores que ponían dinero y todo y los capitanes de sus buques. Hay muchos más nombres.
- ¿Cómo respondían los enemigos del reino de España a esta actividad?
- Pues no se estaban quietos. Los corsarios ingleses, sobre todo los piratas como Drake, en el siglo XVII, asolan Vigo, por ser el epicentro de la extracción y comercio de la pesca salada. Tras la derrota en Trafalgar contra el almirante Nelson, perdimos nuestra Armada y las costas gallegas quedan totalmente descubiertas. La Royal Navy las ataca continuamente, de ahí el sistema defensivo basado en baterías de costa, como las de A Lanzada o Rande. La defensa corre a cargo de las milicias urbanas, de gente que se aglutina y es dirigida por un ex militar. Los que nos protegemos somos básicamente nosotros, excepto Baiona, que es territorio de realengo por su castillo desde el siglo XVI y que sí cuenta con protección.
- ¿Qué ocurría en la costa cantábrica o mediterránea? ¿También había corso?
- En el Mediterráneo había corso a dividir, sobre todo corso berberisco. Si recorres la costa de Levante verás que está llena de torres de vigía, no de defensa. Felipe II está en guerra constantemente contra el Imperio Turco y los piratas berberiscos desde Orán y Argel durante el siglo XVI están asolando las costas mediterráneas continuamente. De nuevo es consecuencia de la pérdida de la Armada Invencible, que ya no tenemos escuadra que nos proteja.
- ¿Y en el Cantábrico?
- Hablando mal y pronto: va a ser el saco de la hostias. Las costas que se encuentran primero al bajar a las Rías Baixas ingleses, franceses y holandeses son estas. Está completamente desprotegido. Se conservan por Espasante, Ortigueira y Bares las balizas de las garitas de vigilancia. Se tenían que defender con los "fachos", las luminarias. De hecho, para evitar los ataques, los alcaldes de las localidades de las Mariña Lucense llegaban a acuerdos con el enemigo dándoles a cambio víveres (risas).
