La violencia machista marcó la sesión plenaria del Concello de Pontevedra durante la jornada de ayer. Así, la moción presentada por el Partido Popular sobre la creación de una casa o pisos de acogida para las víctimas de violencia de género en la ciudad de Pontevedra generó bastante polémica entre las diferentes agrupaciones políticas de la Corporación municipal.
La concejala popular Silvia Junco defendió en el Pleno la necesidad de crear un espacio en la ciudad con el objetivo de que las mujeres víctimas de violencia machista puedan disponer del mismo durante un tiempo para reorientar su situación personal y facilitándole también herramientas económicas y psicosociales. La edil destacó que Galicia dispone en la actualidad de siete centros, de los cuales cinco, según señaló Junco, "son de titularidad municipal y ninguno está en la ciudad de Pontevedra".
Silvia Junco solicitó así a la Xunta de Goberno que se adecúe en Pontevedra un espacio de protección y la inclusión una partida en los próximos presupuestos para solventar esta carencia, "una infraestructura que es prioritaria", indicó.
La concejala del área de Igualdade y Benestar Social, Paloma Castro, realizó una enmienda a la moción presentada por parte de los populares modificando insta a la Xunta de Goberno por "Xunta de Galicia", de forma que logró la aprobación de la moción con el voto favorable de PSOE y BNG.
La edil socialista comentó que su agrupación entiende que " estas residencias son competencia de la Xunta, puesto que así lo recoge la normativa establecida por el Gobierno autonómico, y si la Xunta lo determina, nos sentaremos y firmaremos un convenio para la creación de este espacio". De todas formas, Castro expuso la postura del PSOE al respecto defendiendo la implantación de pisos tutelados dentro de una red de ámbito supramunicipal, puesto que "sería surrealista pensar que una mujer con un riesgo alto según el test VioGén, sea derivada aun piso en su mismo municipio, porque o no sale del centro o tiene que ser trasladada a otro concello, porque podría ser atacada por el maltratador".
El portavoz del PP local, Rafa Domínguez empleó su turno de palabra para tildar al PSOE de "feministas de anuncio", al considerar que cuando se debate una moción para la conciliación o para votar a favor de una moción de su partido para crear un piso municipal de acogida "no están de acuerdo".
Dicha afirmación generó la indignación de la propia Paloma Castro y Carme da Silva, quien respondió que la moción popular "tiene errores de bulto, ya que por el riesgo que conlleva, las mujeres víctimas no pueden ser acogidas en el mismo municipio por motivos de seguridad". Da Silva también criticó que Domínguez "continúe explicando cosas a las mujeres, faltándole el respeto a sus propias compañeras de grupo" y concluyó reiterando que la Xunta de Galicia es la institución responsable en la materia.
Castro reprochó al PP que la violencia de género se combate con hechos y recriminó a los populares que "tienen como socio a un partido misógino, que niega la existencia de la violencia de género y que reniega de la igualdad mandando a las mujeres a coser botones".
Otras cuestiones
Otro de los asuntos que fue debatido en la sesión fue la propuesta de los populares relativa a la cubierta de todas las gradas de los campos de fúbtol de Pontevedra, moción fue rechazada por mayoría con los votos en contra del PSOE y BNG, al entender que "aunque todas las instalaciones deportivas son susceptibles de mejora, existen otras prioridades como el cambio de la hierba sintética, la mejora de la iluminación de los campos de fútbol, la dotación de oficinas a las instalaciones deportivas y la aceleración del pago de subvenciones", propuestas que, "en algunos casos, fueron expuestas por los distintos clubes. Y esta es en la línea en la que trabajaremos de cara al año 2020. Además, todos los recintos de fútbol, a excepción del de Gatomorto, cuentan con gradas cubierta", comentó Tino Fernández.
La modificación de crédito fue otra de las cuestiones que abordó la Corporación municipal. Así, se aprobó por mayoría dicha modificación de 4,2 millones de euros que, según explicó el concejal Raimundo González servirá para "amortizar toda la deuda a finales de mandato, dejándola en poco más de ocho millones, situándose así en su nivel más bajo desde la década de los 80".
Por su parte, el concejal popular Pérez Puga, cuyo partido votó en contra de dicha modificación, criticó que el Concello esté realizando un "grave sustracción de 4 millones de la economía de los pontevedreses, que nos vemos obligados a amortizar deuda por su incapacidad de gestionar los presupuestos".
Por último, el PP local llevó a Pleno la mejora de la seguridad vial en las calles Pintor Laxeiro, Pedra do Lagarto y As Pereira, que fue aprobada por unanimidad.
