La Audiencia Provincial de Pontevedra condenó, con la conformidad del acusado, al operario de una empresa que realizó fotos de índole sexual a una niña en la casa a la que fue a realizar un trabajo. Concretamente, el acusado había sido contratado por la abuela de la niña para instalar una mampara de baño en su vivienda en Pontevedra.

Así, según la sentencia, el 4 de julio de 2017 el acusado acudió al domicilio de esta mujer para instalar la mampara de baño que había encargado a la mercantil para la que trabajaba el procesado. En la misma casa se hallaban los nietos de esta mujer, una niña de siete años y un niño de dos.

Según el fallo, en el momento en que el investigado se percató de que ambos niños estaban jugando fuera de casa, al fondo de la finca, se dirigió a ellos y "movido por la intención de satisfacer sus deseos sexuales, se acercó a la niña, le levantó la falda y le hizo una fotografía con la cámara de su teléfono móvil". De nuevo, más tarde, cuando comprobó que los niños estaban solos en la primera planta de la casa se dirigió de nuevo a la menor y le levantó la falda, le bajó las bragas y le hizo otra foto.

La madre de la menor denunció los hechos ese mismo día y se abrió una investigación que llegó a juicio a la Audiencia el pasado octubre.

En la fecha fijada para la celebración de la vista oral, las partes llegaron a un acuerdo. El acusado reconoció los hechos y aceptó una condena de dos años de prisión, ocho de alejamiento y el pago de 3.000 euros en materia de responsabilidad civil como autor de un delito de abuso sexual sobre menor de 16 años. La sentencia señala que la empresa para la que trabajaba el procesado será responsable civil subsidiario.

Reeducación sexual

Las partes también acordaron la suspensión de la pena de prisión para el acusado, siempre que este no vuelva a delinquir en el plazo de dos años. La suspensión está supeditada también a que el procesado abone la responsabilidad civil y a que se someta a un programa de reeducación sexual.