Cuatro de cada diez fumadores desarrollará la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica) en función de su predisposición genética. En el área sanitaria de Pontevedra esta dolencia afecta aproximadamente a un 12% de la población, si bien el porcentaje está aumentando, como lamenta el neumólogo Adolfo Baloira.

"Desafortunadamente, lejos de disminuir el porcentaje de EPOC está aumentando y hoy estamos en ese 12% de la población entre 40 y 80 años, según el estudio que se va a publicar en breve y que se hace cada diez años", señala a FARO el jefe de servicio del CHOP.

La EPOC tarda años en producirse desde que se fuma el primer cigarrillo y también puede aparecer hasta 15 o 20 años después de dejar de fumar. Unos 2 millones de personas la padecen en España "y más de la mitad sin saberlo", lamenta Adolfo Baloira, "aparecerán algún día en el hospital, en urgencias o en la consulta sin que nadie previamente lo haya diagnosticado".

Los síntomas (tos, flemas, disnea etc) progresan lentamente y el fumador se va adaptando a esas sensaciones hasta considerarlas "normales" y adaptarse a ellas.

El humo del tabaco hace daño a todos los fumadores, si bien en algunos casos, en función de su variabilidad genética, hará más daño. Adolfo Baloira explica en este punto que "en mujeres es un poco más dañina que en hombres, dado que su organismo es un poco más sensible a los irritantes físicos y químicos que tiene el tabaco".

Un hecho curioso es que "hemos visto que cuando damos oxígeno a las personas que tienen insuficiencia respiratoria, en mujeres a los 2 años ya se ve que mejora la supervivencia, en cambio en hombres se tarda hasta tres años. Ellas son más sensibles al daño pero también parece que responden un poco mejor a los tratamientos".