Entre 67 y 68 millones al año. Este es el impacto económico que es calcula que tienen las unidades del Ministerio de Defensa radicadas en la provincia de Pontevedra y que se concentran básicamente en dos grandes instituciones como son la Brigada Galicia VII y la Escuela Naval Militar.
El subdelegado de Defensa en Pontevedra, el coronel Ángel de Miguel Campos, reconoce que la Brilat y la ENM son los dos "buques insignia" de Defensa en la provincia, pero insiste en que las unidades dependientes del Ministerio van mucho más allá. En total hay unos 3.500 efectivos (la mayor parte en la Brigada y en la Escuela) pero también hay otros destinos como la Unidad de Servicios de la base, la de Farmacia Militar, la de Expedientes Administrativos, el personal de las residencias del Ejército de Tierra y de la Escuela Naval o el colegio Salvador Moreno (que depende de la Armada). Se suman a la lista las comandancias navales de Vigo y el Miño, la propia Subdelegación de Defensa o las oficinas del ISFAS en Pontevedra y Vigo que prestan servicio a un total de 13.000 personas en la provincia entre titulares y beneficiarios (es decir, militares y sus familias).
¿Cómo se desglosa este impacto económico del Ministerio de Defensa en la provincia? Hay que diferenciar entre impacto directo e indirecto. En el primer apartado se puede hacer referencia, principalmente, a las nóminas del personal militar. Se calcula que los 3.500 efectivos de las Fuerzas Armadas "mueven" de forma ordinaria cada año unos 56 millones de euros en salarios. Se calcula que dos terceras partes de esta cifra corresponden a la Brilat. A esto salarios ordinarios habría que sumarle otros dos millones más que cada año reciben puntualmente los efectivos como plus por razones de servicio: desplazamientos a reuniones de planificación, maniobras, entre otros.
En aquellos años en los que se realizan misiones internacionales, esta cifra se dispara. Por ejemplo, en el actual ejercicio de 2019 la Brilat se ha desplegado en Mali y Líbano. Se calcula que movilizar a unos 550 soldados durante seis meses supone unos ingresos extra de 9 millones de euros para estos efectivos.
A este impacto indirecto habría que sumar lo que en el ámbito militar se denominan "créditos de vida y funcionamiento". Básicamente, es el dinero que hace falta para materiales y equipo que son necesarios para el funcionamiento diario de las bases y unidades. Suministros que habitualmente se compran en la propia provincia. Su repercusión económica, en este caso, es difícil de calcular por tratarse de gasto corriente diario.
Dentro del impacto indirecto sí que se pueden valorar los costes de los distintos servicios que contrata Defensa en la provincia y que salen a concurso público cada año. Por ejemplo, el servicio de limpieza de la base General Morillo, adjudicado actualmente a Clece, por un importe de unos 700.000 euros; el de alimentación de la Brilat y la Escuela Naval, por una cuantía similar, o el de combustible tanto para calefacción como para los vehículos. Solo en el caso de la Brigada Galicia, en combustible se gastan unos 700.000 euros anuales. Estas empresas subcontratadas adquieren sus bienes y servicios (desde productos frescos en la alimentación al combustible) en la provincia.
Patrimonio
El impacto económico de no se queda ahí, dado que el Ministerio también realiza un gasto importante en lo que respecta al mantenimiento de su patrimonio. No en vano, el Ministerio es, por ejemplo, titular de más de 300 viviendas en la provincia. Sin ir más lejos, el pasado año se invirtió medio millón de euros en la reparación de las viviendas militares de la calle General Rubín en Pontevedra.
También hay que recordar que el Ministerio abona cada año 250.000 euros a los comuneros de Salcedo, Figueirido, Vilaboa y San Xulián como canon de utilización de los terrenos de la base de la Brilat, dinero que repercute directamente en el monte a través de las actividades que desarrollan estas comunidades de vecinos.
Finalmente, otro aspecto a tener en cuenta es el Centro Universitario de la Defensa. Ubicado en la Escuela Naval Militar y dependiente también de la UVigo, esta institución académica nacida a raíz del Plan Bolonia cuenta con un presupuesto de unos dos millones anuales y tiene en nómina a docentes y otros personal que también reside en la provincia.
Así, el cálculo que realiza la propia Subdelegación son estos 68 millones anuales que se mueven en Pontevedra por parte de las unidades de Defensa, una cantidad a la que habría que sumar, por ejemplo, las ayudas oftalmológicas, ortopédicas y de otra índole que se conceden a través del ISFAS. Es decir, que Defensa se podría considerar como una de las principales "empresas" de la comarca.
El 72% de los efectivos de la Brilat son gallegos
Dentro de esos 56 millones de euros en nóminas que se quedan en Pontevedra para pagar su salario a los 3.500 militares que hay en la provincia cabe destacar que la mayor parte, unos 40 millones, corresponden a la Brilat y, concretamente, a los 2.100 efectivos que tienen como destino la base General Morillo de Pontevedra. Es decir, sin contar los otros acuartelamientos de la unidad.
Aunque la práctica totalidad de los soldados con destino en Figueirido tienen su domicilio fijado en la provincia, sí que es verdad que hay militares profesionales llegados de distintos puntos de España, pero aún así cabe destacar también el profundo carácter gallego que tienen las unidades destinadas en Pontevedra. Y es que el 72% de los militares con destino en la base pontevedresa son de origen gallego y un 40% son pontevedreses.
Las Fuerzas Armadas se revelan también como una salida profesional y formativa para mucha gente joven. De los efectivos que componen la Brilat, un 27% de total tienen entre 10 y 30 años. Un 54% cuentan ya entre 31 y 40 años y un 19% son mayores de esta edad.
En cuanto a la presencia de la mujer, el porcentaje en la Brigada es de un 14%. El coronel Ángel de Miguel Campos destaca que es un porcentaje en ascenso en los últimos años y que está entre los más elevados de entre los socios de la Alianza Atlántica. Mientras los franceses si cuentan con un porcentaje más elevado de un 19% de presencia femenina entre sus tropas, Italia apenas tiene un 4% y los porcentajes en Alemania, Países Bajos o Reino Unido se sitúan en torno al 9%.
En lo que respecta a la Escuela Naval, el hecho de que sea el único centro de formación de oficiales de la Armada de España provoca que sus alumnos procedan de todos los puntos del territorio nacional. En este caso, el 10% de los aspirantes a oficiales son mujeres, pero el porcentaje crece en unidades como en el Cuerpo de Sanidad o en los Cuerpos Comunes, que es del 50%. Para De Miguel Campos no hay duda de que "la presencia de la mujer cada vez es más importante" en las distintas unidades de las Fuerzas Armadas.
"La simbiosis de la Brilat y de la Escuela Naval Militar con la comarca y Galicia es clara y evidente"
El subdelegado de Defensa, el coronel Ángel de Miguel Campos, considera que es importante señalar que el impacto económico en la provincia de dos unidades como son la Escuela Naval Militar o la Brilat no solo se puede medir en términos de gasto directo o indirecto del Ministerio. Ambas unidades ofrecen también un retorno económico a la ciudad y a la provincia en cuanto a proyección nacional e internacional.
De Miguel Campos destaca, por ejemplo, como la integración de forma destacada de la Brilat en la VJTF permitió poner el nombre de Galicia que lleva la Brigada en toda Europa, así como cada vez que es desplegada en una misión internacional. A veces, demostrando "una gran profesionalidad e implicación" como ocurrió en las últimas que se desarrollaron en Líbano y, especialmente, en Mali, en donde evitaron una masacre entre las tropas europeas.
Además, ese retorno económico también llega en forma de pernoctaciones. La integración en fuerzas de carácter internacional como la VJTF obliga al desplazamiento a Pontevedra de efectivos de otros ejércitos que se alojan en la ciudad. Eso sin contar los actos que celebra tanto la Brilat como la Escuela Naval y que atraen a numerosas personas a la base. Sin ir más lejos, por ejemplo, la entrega de despachos de la Armada en Marín en el mes de julio trae a la comarca a una media de 3.500 personas que permanecen en la zona unos tres o cuatro días.
De Miguel destaca también la integración de la Escuela Naval Militar y de la Brigada Galicia en la provincia con la participación de sus bandas de música en multiples actos culturales a lo largo del territorio gallego: "La simbiosis entre de la Brilat y la Escuela Naval con Pontevedra y con Galicia es clara y evidente", señala el subdelegado de Defensa.
La Subdelegación también continuará con su labor de promover la cultura de Defensa entre la población y destaca su presencia en algunas de las ferias como Edugal o la Semana Verde con un importante número de visitas a sus puestos. Este año han impartido conferencias en más de 70 colegios y consideran fundamental que los orientadores incluyan las Fuerzas Armadas como una salida laboral y formativa a la hora de informar a los adolescentes sobre sus opciones de futuro.
Entre 700 y 1.000 aspirantes a ingresar cada año
La Subdelegación del Gobierno recibe una media de entre 700 y 1.000 aspirantes a ingresar en la escala de tropa y marinería de las Fuerzas Armadas cada año en la provincia de Pontevedra. La demanda se estabilizó un poco frente a los años más duros de la crisis, pero todavía sigue siendo "muy importante". Aunque compiten por plazas con personal de todo el territorio nacional, un 33% de los pontevedreses logran un plaza.
