"Tenemos que agradecer al Partido Popular que haya dejado en evidencia, de una vez por todas, que el tema de la Policía Local en Pontevedra es claramente un conflicto partidista" aseguró ayer la concejala de Protección Ciudadana, Eva Vilaverde.

Vilaverde salía al paso de la comparecencia realizada por el grupo municipal del PP en la que dio cuenta de la decisión del juzgado de archivar el conocido como "el caso de los semáforos", derivado de una denuncia interpuesta por el intendente de la Policía Local contra dos agentes. La edila aseguró que el caso respondía a un procedimiento reglado que se llevó a cabo en la Policía Local y que desde el gobierno municipal "nunca nos metemos, ni nos vamos a meter, en un procedimiento interno, reglado, de un cuerpo profundamente jerarquizado y con una jefatura de mandos que es la que determina cuando se ponen en conocimiento cualquier cuestión en el juzgado o en la fiscalía".