La cabeza de lista del BNG para las elecciones generales por la provincia de Pontevedra, Carme da Silva, reclamó en Pontevedra un concierto económico para Galicia, y la creación de una Hacienda gallega propia y de una Agencia Tributaria gallega que posibiliten que los ciudadanos "nos responsabilicemos de nuestros recursos" y "los invirtamos en las necesidades prioritarias para el país". La nacionalista también reivindicó una mayor justicia fiscal: "que las empresas e industrias ubicadas en Galicia tributen en Galicia".

Según Da Silva, el problema de la financiación autonómica de la Xunta, y que lleguen desde Madrid los recursos para hacer inversiones y dotar de servicios acomodados a Galicia (sanidad, educación, bienestar social?) se repite año tras año. Cree que el problema de los 700 millones que el Estado adeuda a Galicia estaría resuelto.